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Vertebrados acuáticos de Black Crow (Namibia). Familia Crocodylidae Cuvier

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Los depósitos de piedra caliza de agua dulce en Black Crow, Namibia,han producido una baja diversidad de vertebrados acuáticos y acuófilos que comprenden tres especies de peces, una rana y un cocodrilo. Estos vertebrados sugieren que, en el momento de la deposición el área se encontraba dentro de un régimen climático tropical a subtropical, y que los cuerpos de agua eran frescos, transparentes y bien oxigenados, contrastando con las condiciones áridas que prevalecen en el área hoy en día. 

Namibia limita al norte con Angola y Zambia, al sur con la República Sudafricana, al este con Botswana y la República Sudafricana, y al oeste con el Océano Atlántico.Su relieve está formado predominantemente por mesetas. En la más alta de ellas, en el oeste,  se eleva el pico más alto del país, el monte Brandberg de 2606 metros de altitud. Otras formaciones montañosas son la meseta de Kaokoland, en el norte, la de Damara y la del Gran Nama, con alturas entre los 1400 y los 2600 metros. La costa está ocupada por el Desierto del Namib y el este y sur por el desierto de Kalahari.Los ríos más importantes son el Cunene y el Okavango en el norte, y el Orange en el sur.El clima cálido y seco, con temperaturas que oscilan entre 10º C y 30º C.Nos situamos en Black Crow. El depósito fosilífero comprende un espesor de 16 metros de piedra caliza que recubre las dolomías proterozoicas del grupo gariep y la cuarcita "Pomona", y a su vez está cubierto por el conglomerado neogene blaubok y la calc-corteza de Namib-1.




Figura 1. Mapa de Sperrgebiet (señalado en rosa), región de Namibia en la que se encuentra Black Crow.


La escasa diversidad de restos de vertebrados acuáticos y acuófilos de la Piedra Caliza Black Crow incluye peces, ranas y cocodrilos. En concreto, se estudiaron restos de cocodrilos (más de 170 dientes), una posible cíclido con dientes en forma de botón (10 dientes), un Tigerfish (Hydrocynus sp. un diente) y un posible Alestes o Brycinus (un diente).
Como conjunto, los acuófilos indican que el cuerpo de agua en Black Crow comprendía agua fresca y bien oxigenada, y que las condiciones paleoclimáticas en el momento de la deposición eran tropicales a subtropicales, en marcado contraste con el régimen híper-árido actual, con lluvias de invierno. 

En general, los dientes de los cocodrilos presentan coronas cónicas, separadas a menudo de la raíz cilíndrica por un leve estrechamiento. Las coronas son muy puntiagudas y tienen gruesas paredes. Cada diente está implantado en un alvéolo profundo en el maxilar y queda sujeto en su sitio por un tejido conjuntivo no calcificado. La dentición es isodonta, lo que significa que todos los dientes son muy similares en forma y tamaño.

Se ha demostrado que la duración de la vida útil de cada pieza dentaria es de hasta dos años, aproximadamente el doble del tiempo que pasa en posición funcional. Al parecer, los dientes situados al frente del hocico se reemplazan con más frecuencia que los más cercanos a la garganta. Los dientes de reemplazo se desarrollan a partir de material germinal en una bolsa poco profunda, situada al lado de la lengua, dentro del alvéolo dental del diente funcional. En las primeras fases de desarrollo, el diente de reemplazo migra a través de un orificio de la base cilíndrica del diente viejo y se sitúa dentro de la cavidad de la pulpa de este último, donde su corona madura hasta alcanzar el tamaño máximo. A medida que el diente de reemplazo se acerca a la madurez, los restos de la raíz del diente viejo son reabsorbidos y su corona finalmente se desprende.

Figura 2. Dibujo esquematizado de la estructura de un diente de cocodrilo.

Los dientes de cocodrilo son bastante comunes en Black Crow, se han encontrado más de 170 especímenes. Se encontró un fragmento de maxilar de un espécimen y también se encontraron una vértebra y fragmentos de "scutes". Hay cuatro morfotipos dentales principales de cocodrilo según las posiciones de los dientes en las mandíbulas superior e inferior.


Figura 3. Fragmento de maxilar izquierdo que contiene un diente "caniniforme" enraizado (morfotipo 2) detrás del cual forma parte del alvéolo de un segundo diente. A) vista estéreo-oclusal, B) vista estéreo-lingual, C) vista estereoscópica de la vista lateral erosionada por el viento. 


El morfotipo 1 (figura 4A-E) consiste en dientes coronados relativamente bajos que, cuando se observan desde el aspecto bucal o lingual, tienen un perfil de corona semicircular, algunos con un ligero punto en el ápice.
En la vista oclusal, estos dientes están algo comprimidos buco-lingualmente, con una superficie lingual cóncava, casi recta, y una bucal convexa. El esmalte a menudo está adornado con surcos verticales y crestas. 

El morfotipo 2 (Fig. 4F-J) tiene coronas ligeramente más altas y más puntiagudas que el morfotipo 1, y algunas muestras conservan una estructura de raíz, que incluye una muestra in situ en un fragmento maxilar. Estos dientes también poseen una pestaña filosa en los bordes mesial y distal de la corona.





















Figura 4. Dientes de cocodrilo de Black Crow. A-E) morfotipo dental 1; F-J) morfotipo dental 2. 



El morfotipo 3 (figura 5) tiene coronas más altas que el morfotipo 2, que son casi circulares en la vista oclusal y con un ápice en punta. Algunas muestras presentan una superficie de esmalte acanalada, otras tienen facetas de desgaste en un lado (o dos) presumiblemente causadas por la abrasión contra el diente antagonizante en la mandíbula opuesta.















Figura 5. Dientes de cocodrilo aislados de Black Crow. A-E) morfotipo dental 3. 



El morfotipo 4 dental se parece al morfotipo 3, salvo por la presencia de un ápice romo en lugar de uno puntiagudo (Fig. 6). Sobre la base de las dimensiones de los dientes, la muestra de Black Crow sugiere que es probable que haya una sola especie de cocodrilo de tamaño corporal pequeño (1-2 metros de longitud de la cola y la cola) en el sitio. Con la muestra disponible no es posible determinar a qué género pertenecen estos dientes, pero es posible descontar el accesorio de Euthecodon y otros cocodrilos con dientes altos y puntiagudos. La impresión general es que los dientes no son muy diferentes de los de Crocodylus, lo que sugiere que el cocodrilo Black Crow era un generalista dietético más que un piscívoro especialista.




















Figura 6. Dientes de cocodrilo aislados de Black Crow. A-E) morfotipo dental 4.


Referencias:




PTEROSAURIOS, EXPECTATIVA VS. REALIDAD

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El cine, a pesar de ser una gran maravilla para los humanos, ha hecho que imaginemos las cosas de una forma que no son. Nos pasa con el amor idealizado, nos pasa con algunas situaciones, y por supuesto nos pasa con los dinosaurios y toda clase de organismos del pasado. Mi intención con este artículo es dar una imagen realista sobre uno de los personajes (secundario en ocasiones) de grandes obras cinematográficas.
Buenas tardes lectores y lectoras, esta es la primera entrada que hago en este blog y tanto esta como las siguientes irán relacionadas con los pterosaurios. 
Hoy concretamente hablaremos de la familia Azhdarchidae. 

Para quien no les conozca, los pterosaurios son unas criaturitas del Mesozoico, más concretamente del Cretácico.
Como no quiero aburrir mucho, diré a modo de resumen que durante esta época, hubo gran cantidad de dinosaurios, flora y otros organismos que empezaron a darse a conocer.

Se ha descrito de varias formas cómo fueron estos animales, sin embargo, en ocasiones dichas descripciones pueden estar muy lejos de la realidad.

Para que os hagáis una idea, los pterosaurios eran, como se dice en el artículo, lo más parecido a un pelicano. Sí sí, como los de Nemo, ¿os le imagináis transportando a los pececillos como hacía el de la peli? Hay un poco de diferencia en el peso...quizá también en la longitud... bueno y en la envergadura... pero ya sabéis lo que se dice: ¡el tamaño no importa!

Pero bueno, vamos a centrarnos. Esta comparación con los pelicanos tiene una base científica, y es que hay hipótesis que dice que tenían un cuello similar que les permitía tener lo se que conoce como saco gular y que haría la función de lo que sería una red de pescar para sus jornadas de caza durante los sobrevuelos acuáticos.

Y ya que hemos entrado en temas del cuello, se ha debatido mucho sobre hasta qué punto era algo positivo en su vida, porque este era más largo de lo común (y es algo que les diferenciaba de los demás pterosaurios). Esto podría ser una ventaja en el sentido de que podrían cazar desde las alturas de una forma más sencilla.

Por otra parte, también hay que comentar que han sido comparados con los buitres porque se piensa que estos seres eran carroñeros y 'acosadores terrestres' (Amy Klein, Curtis W. Anderson).

Antes de meterme con otros temas sobre nuestro querido ser del pasado, quiero desmontar un mito:
Los pterosaurios no tenían una mandíbula tan fuerte como para levantar grandes pesos de la superficie. De hecho solo podían cazar animales parados o muy lentos.




Una vez que ya tenemos más o menos asimilado cómo sería un pterosaurio, VAMOS A DAR PASO A LOS VERDADEROS MOTIVOS POR LOS QUE HE ESCRITO ESTE ARTÍCULO:  su hábitat y su vuelo.

Con respecto al hábitat, hay motivos para creer que les gustaba pasar los días en familia cerca de un bonito paraje donde el agua fuera el protagonista. Y, ¿por qué digo esto? Pues porque se han encontrado evidencias, como fósiles de juveniles en Uzbekistán, cerca de un río. Con esto podemos decir que anidaban en ambientes húmedos (en este caso, en las proximidades de un río).

Sin embargo, también se han encontrado fósiles en zonas en las que había vegetación, es decir, en zonas más internas. Esto tiene un porqué, y es que los pterosaurios tenían unas alas cortitas (ahora lo veremos) y anchas, que les permitieron despegar el vuelo desde una superficie de estas características.

A continuación vamos a intentar saber un poco más sobre su vuelo, pero para esto, hay que analizar sus alas.
Es cierto que se han comparado con las de los murciélagos, y no es del todo incorrecto por el tema de que comparten atributos, sin embargo, a nivel de biomecánica no son comparables.
Las alas de los pterosaurios eran membranosas e iban unidas desde las extremidades anteriores a las posteriores. Por esta misma causa sabemos que eran cuadrúpedos.

Un problema a la hora de volar era el peso: estos animales eran más grandes de lo que se pensaba, y pesaban mucho (hablamos de cifras entre 70 y 250kg), así que esto sería importante a la hora de conocer cómo levantaban el vuelo.

Hay una hipótesis que dice que se utilizaba el calor como método para cambiar la altitud a la que volaban. Tampoco se puede saber mucho más sobre la forma de volar porque no hay ninguna especie que se pueda comparar. 

De todas formas, aún queda mucho por aprender sobre la historia de nuestro planeta y los que fueron sus habitantes.



Os invito a leer en profundidad el artículo y nos vemos en la próxima publicación para saber más sobre nuestros amigos los pterosaurios.


  • Klein, A., & Anderson, C. (2017). A Summary of Current Research on the Functional Morphology of Flight in Azhdarchid Pterosaurs. Advanced Journal Of Graduate Research, 3(1), 9-12.


UN ICONO DE LA EVOLUCIÓN

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UN ICONO DE LA EVOLUCIÓN

¿Es un ave?, ¿Es un reptil?: NO! Es Archaeopteryx.

Para comprender la revolución que supuso el hallazgo de esta especie, debemos mirar al pasado. Partimos de la base de que a principios del siglo XIX la corriente creacionista tenía gran peso sobre la sociedad, debido a una interpretación literal de Génesis 1: 20-25 en la cual se describe las creaciones de la naturaleza en diferentes días. En esta época, Charles Darwin a pesar de sus ideas controvertidas, defendiendo, a pesar de las innumerables críticas el modelo evolutivo, publicó en 1859: On the Origin of Species(El Origen de las Especies).

Figura 1: Archaeopteryx

Nada más y nada menos que dos años más tarde de la publicación de este libro, se encontró el primer individuo completo de esta especie. Muy pronto los científicos se dieron cuenta de la importancia del descubrimiento: Darwin acababa de enunciar su teoría de la evolución, y Archaeopteryx era una demostración palpable de la relación entre las aves y los dinosaurios, lo que hoy en día conocemos como fósil transicional. De hecho, el esqueleto de Archaeopteryx es tan parecido al de los dinosaurios terópodos 
                          (los carnívoros bípedos como Velociraptor y Tyrannosaurus) que si no fuera por las impresiones de plumas que lo acompañan quizá no se le habría identificado con un ave. De hecho, así ha ocurrido con uno de los fósiles de Archaeopteryx, descubierto a mediados del siglo XX; en un principio fue atribuido a la especie Compsognathus (un pequeño terópodo), hasta que años más tarde se descubrieron las impresiones de las plumas.

Por lo tanto, no es sorprendente que Archaeopteryx se convirtiera en un fósil famoso e importante, ya que representó por mucho tiempo la única buena evidencia para la transición de reptiles a aves.

Otro aspecto que ciertamente contribuyó a esta fama fue la rareza de los descubrimientos de Archaeopteryx: después del segundo descubrimiento de un Archaeopteryx, probablemente en 1875, no fue sino hasta 1959 que se anunció un nuevo espécimen. Sin embargo, desde la década de 1970, se ha descrito un número creciente de especímenes nuevos (o recientemente identificados), lo que hace de Archaeopteryx un taxón bastante conocido hoy en día.

Figura 2: A nuestra derecha podemos observar el espécimen descubierto en Berlín.


Para intentar comprender la historia que envuelve a este animal, hablaremos de sus orígenes. Se considera el bipedalismo como una etapa preadaptiva para el vuelo de las aves. Atribuimos la formación de bipedismo completo en los ancestros de las aves con la transición de las extremidades pélvicas de la posición segmental a la parasagital. Esta transición fue lo suficientemente rápida. Podemos suponer que las extremidades pectorales liberadas del soporte permanecieron espaciadas lateralmente y dieron un conjunto de transformaciones que permitieron la aparición de lo que podría ser una versión morfológicamente "parecida a un ala" de los miembros torácicos.  Gracias a esta teoría, John Ostrom (paleontólogo del siglo XX que dedicó su vida al estudio de los dinosaurios, asemejándolos a aves no voladoras en vez de a reptiles) utilizó al Archaeopteryx para demostrar que las aves actuales provienen de los dinosaurios terópodos pues estos últimos presentaban rasgos avianos. Ostrom revigorizó la idea de la evolución de dinosaurio a ave en 1960 con el descubrimiento de Deinonychus.

Esta especie fue hasta ahora conocida principalmente por la Formación Altmühltal (principios del período Titoniense) de Baviera, en el sur de Alemania, aunque resulta que un espécimen nuevo (el espécimen esquelético número 12) de la Formación Titoniense más temprana de Schamhaupten (Baviera) parece ser hasta ahora el más antiguo del género.

Es curioso saber que en general, los restos esqueléticos y las partes blandas levemente mineralizadas de los plattenkalks (piedra caliza de grano muy fino) del Jurásico Superior del sur de Alemania y de muchos otros depósitos son fluorescentes bajo luz ultravioleta (UV). Durante las últimas dos décadas, el uso de UV en la investigación con tetrápodos fósiles ha demostrado ser importante para revelar nueva información. Este uso permite una investigación más precisa de los detalles morfológicos de restos óseos y partes blandas. La técnica se puede usar para distinguir las suturas óseas de las grietas, para establecer con mayor claridad los contornos de los elementos esqueléticos comprimidos y para separar los huesos o las partes blandas de la matriz subyacente.

Figura 3: Descripción general del esqueleto de la nueva muestra de Archaeopteryx bajo luz ultravioleta.

También es digno de mención los restos óseos de dentaduras de Archaeopteryx encontrados en la localidad de Cherves-de-Cognac (Francia).

Otro tema a comentar es la división de opiniones existente entre los paleontólogos acerca de la monofilia de Archaeopteryx, es decir: ¿Podremos encontrarnos ante dos ramas separadas en la evolución de esta especie o sólo estamos ante una? Sólo el tiempo lo dirá.

Por último, recomiendo a todos mis lectores que vayan a visitar si algún día les fuera posible el Dinosaurier Freiluftmuseum Altmühltal en Denkendorf, Bayern, donde se exhibe en público y está disponible para su posterior estudio científico. Además, el espécimen fue registrado como patrimonio cultural nacional alemán, lo que garantiza su disponibilidad permanente, a pesar de que permanece en manos privadas.

Y ya me despido hasta la próxima entrega, espero que os haya gustado. ¡Un saludo!

REFERENCIAS:
  • Rauhut OWM, Foth C, Tischlinger H:  The oldest Archaeopteryx (Theropoda: Avialiae): a new specimen from the Kimmeridgian/Tithonian boundary of Schamhaupten, Bavaria. (2018)
  • Foth C, Rauhut OWM: Re-evaluation of the Haarlem Archaeopteryx and the radiation of maniraptoran theropod dinosaurs (2017)
  • Tsuihiji, T. 2017. The atlas rib in Archaeopteryx and its evolutionary implications. Journal of Vertebrate Paleontology.
  • Society of Vertebrate Paleontology (SVP) 77th Annual Meeting, Calgary, Canada, 23-26 August 2017, p. 178
  • Louchart A, Pouech J: A tooth of Archaeopterygidae (Aves) from the Lower Cretaceous of France extends the spatial and temporal occurrence of the earliest birds (2017)
  • Vestnik Zoologii, Volume 51, Issue 2, Pages 179–182, ISSN (Online) 2073-2333
  • Darwin C: On the Origin of Species





¡Cámbienme la momia, ésta tiene una mosca!

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Un buen paleontólogo (¡un buen científico!) ha de fijarse en los detalles. Pues son precisamente los más mínimos detalles de los grandes hallazgos científicos los que pueden ser de mayor importancia, y no siempre se tienen en cuenta.
De estos detalles precisamente se van a ocupar mis publicaciones, inspirado por el trabajo de unos científicos italianos (First record of Phormia regina(Meigen, 1826) (Diptera: Calliphoridae) from mummies at the Sant’Antonio Abate Cathedral of Castelsardo, Sardinia, Italyque encontraron, en unas momias del siglo XVIII, en la cripta de una iglesia de Cerdeña, pupas de Phormia regina,  una especie de mosca que no existe en la actualidad en la isla. Gracias a este repentino hallazgo de las cápsulas de los dípteros, se ha podido, mediante las técnicas de la llamada “Entomología forense”, contar la historia de las muertes de los sujetos en cuestión, y mediante la paleobiogeografía, trazar la pasada distribución de uno de los insectos con mayor representación en Europa.

Y una vez más, gracias a un repentino hallazgo, ahora el del artículo de G.Giordani, F.Tuccia, I. Floris y S.Vanin por mi parte, puedo explicar una serie de casos en paleontología en los que se han descubierto cosas fascinantes poniendo la atención en lo más aparentemente aleatorio o incluso reciente, comparando los casos de mi estudio con el registro fósil.

Momias en paleontología.


Las momias que se han encontrado de la gran fauna pleistocénica se pueden considerar famosas incluso, ya que con estas momias de Mammuthus primigenius, Coelodonta antiquitatis o Bison priscus se ha considerado la posibilidad de la clonación y reintroducción de estos y otros elementos emblemáticos de la megafauna de la última glaciación en ambientes aislados, ya que se ha llegado a postular que su desaparición fue a causa de la caza intensiva por parte de nuestros parientes lejanos de entonces. Y es que precisamente estas momias, como han sufrido procesos de fosilización natural, es decir, en la mayoría de los casos, congelación rápida y posterior secado lento, conservan aún mucha información aparte del espécimen en sí: tierra, polen, parásitos... que son muy interesante para aprender acerca de la biología de las especies halladas, pero también de su ecología, etología, y hasta para poder establecer un marco más global, sirviendo como datos en investigaciones de paleoclimática, por ejemplo.
También se consideran momias en muchas fuentes, sin serlo realmente, los casos, contables y contados, de fosilización de tejido blando, que ha dado lugar a la conservación de órganos, escamas, plumas y demás estructuras poco conocidas de los dinosaurios; por lo que estos especímenes son muy valiosos (tanto, que habrá que dedicarles un post aparte…).

 Uno de los casos más interesantes es el de la Paleoparasitología, no como ciencia pura, sino como lo que nos ha ayudado a comprender del pasado de nuestro planeta en cuanto a vidas animales, vegetales e incluso humanas. La paleoparasitología es un sector incipiente de la paleontología: los exoparásitos (es decir, parásitos externos) no se conservan, salvo en muy raros y contados casos, en el proceso de fosilización, y los endoparásitos solo  han podido ser estudiados en material primitivo no fosilizado: en momias.

Casos concretos, de lo más sorprendentes.



Muchos son los trabajos que han descrito hallazgos increíbles e insospechados en las momias animales halladas; pero por poner algún ejemplo para fundamentar el artículo, yo destacaría el hallazgo de pupas de Protophormia terraenovae en momias degrandes mamíferos hallados en Bélgica. Gracias a el hallazgo de las moscas en los especímenes se ha podido saber mucho más: se ha podido conocer con precisión cuánto tiempo estuvieron los animales muertos antes de ser congelados y enterrados, y se ha podido establecer, en base al desarrollo de las pupas, que la muerte de los especímenes tuvo que darse a finales del invierno, comienzos de la primavera.
Otro hallazgo insospechado, y un poco menos agradable, es el hallazgo en un yacimiento de permafrost en Alaska, en el que se encuentran también más animales momificados, una pila de haces congeladas de mamut. Este hallazgo ha supuesto un avance en el conocimiento de la biología y ecología de Mammuthus primigeniu. El estudio de esas heces ha llegado a proponer la teoría, pendiente de demostración por  la ausencia de especímenes como este, que los mamuts practicaban la coprofagia, es decir, comían heces. Esto se ha comprobado gracias a la exanimación del –espécimen de naturaleza escatológica- al microscopio: se han podido ver esporocarpos del hongo Podospora conica hongo coprofílico, es decir que se desarrolla en las heces. Más especulaciones del trabajo americano-holandés señala a que las heces consumidas por el mamut carecen de ácido biliar, por lo que sería seguramente de otro mamut.

¿Hacia qué se van a orientar las siguientes publicaciones?


El sector de las momias en la paleontología está poco trabajado, debido principalmente a que, aunque ya se han encontrado bastante especímenes, son todos de una época muy reciente, de hecho, ya convivían seguramente alguno de los animales momificados que conservan los grandes museos del mundo, con el Homo sapiens. Una vez se investiga sobre el tema, se encuentra que tienen una gran importancia en el estudio del Cuaternario.

Esta serie de publicaciones tendrán como tema el divulgar acerca de los detalles de las momias que han sido estudiadas por la paleontología, tanto de grandes vertebrados como de las pequeñas pulgas que estos pueden contener en su pelaje… También le dedicaremos contenido a las “momias honoríficas” que antes he mencionado, a los casos de fosilización excepcional de dinosaurios: de pieles de individuos, o de más tejidos blandos. Otro sector de estudio insospechado para la paleontología (contradictorio incluso) son momias humanas, tanto prehistóricas como históricas: pues hay en muchos casos en los que los arqueólogos han tenido que derivar sus investigaciones  en paleontólogos, por que han encontrado argumentos para estudios de paleoclimatología, paleobiogeografía e incluso paleomedicina.

Bibliografía:


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Gautier, A., and H. Schumann. “Puparia of the subarctic or black blowfly protophormia terraenovae (Robineau-Desvoidy, 1830) in a skull of a Late Eemian (?) bison at Zemst, Brabant (Belgium).” Palaeogeography, Palaeoclimatology, Palaeoecology, vol. 14, no. 2, 1973, pp. 119–125., doi:10.1016/0031-0182(73)90007-2.
Geel, Bas Van, et al. “Mycological evidence of coprophagy from the feces of an Alaskan Late Glacial mammoth.” Quaternary Science Reviews, vol. 30, no. 17-18, 2011, pp. 2289–2303., doi:10.1016/j.quascirev.2010.03.008.
Germonpré, Mietje , and Marcel Leclerq. “Des pupes de Protophormia terraenovae associées à des mammifères pléistocènes de la Vallée flamande (Belgique).” ResearchGate, 1994.
Giordani, Giorgia, et al. “First record of Phormia regina (Meigen, 1826) (Diptera: Calliphoridae) from mummies at the Sant’Antonio Abate Cathedral of Castelsardo, Sardinia, Italy.” PeerJ, vol. 6, Apr. 2018, doi:10.7717/peerj.4176.
Guthrie, R. Dale, and Samuel Stoker. “Paleoecological Significance of Mummified Remains of Pleistocene Horses from the North Slope of the Brooks Range, Alaska.” Arctic, vol. 43, no. 3, Jan. 1990, doi:10.14430/arctic1621.

¿Se puede usar la luz para datar rocas?

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La estratigrafía del Cuaternario y los cambios en el nivel del mar son un objeto de estudio muy común en el Mediterráneo. Sin embargo, la datación numérica de estratos y, por tanto, la información que nos proporcionan, se encontraban muy limitadas para las costas de Chipre. Hasta ahora, la datación se basaba en métodos radiométricos aplicados sobre los fósiles que se encontraban, pero parece ser que las técnicas de datación basadas en la luminiscencia ópticamente estimulada son más apropiadas para la datación directa de los sedimentos de la costa de Chipre. En la figura 1 están marcados los lugares de donde se extrajeron las muestras para el estudio.


El estudio de los sedimentos permite el análisis de los cambios en el nivel del mar, así como de los cambios tectónicos y paleoambientales, y formar correlaciones con los datos geológicos de otras zonas del Mediterráneo oriental. A la hora de formar estas correlaciones hay que hacerlas con cautela, pues los datos obtenidos mediante OSL (luminiscencia ópticamente estimulada, en inglés, optically stimulated lumniscence) u otros métodos de datación luminiscente difieren de los que se tenían. Algunos depósitos al norte de Israel estaban datados entre 127 y 75ka (entre 127 mil y 75 mil años), sin embargo, la datación luminiscente data su depósito hace 65 mil años durante una etapa con un nivel del mar más bajo.

En la tabla que hay a continuación se muestran los resultados de otros trabajos anteriores. Como se puede ver, las edades de las muestras anteriores no coinciden con las datadas con técnicas luminiscentes, lo cual hace aún más difícil elaborar correlaciones.


La OSL es una técnica usada frecuentemente en la datación de sedimentos basada en la liberación de los electrones (en forma de fotones, es decir, luz) que quedan atrapados en la roca cuando esta es privada de exposición a la luz. En este caso, la OSL se usó para datar depósitos de eolianitas que forman las dunas paralelas a la costa, pero se vio que los resultados estaban afectados por materiales inestables. Este problema se solucionó empleando otro método de datación luminiscente, la luminiscencia estimulada por infrarrojos (IRSL, infrared stimulated luminiscence), en el que la muestra a datar se irradia con infrarrojos elevando su temperatura. La OSL se emplea generalmente con cuarzo y la IRSL con feldespatos. En la siguiente imagen se muestran los primcipios de las técnicas de datación luminiscente.


Por primera vez se ha podido datar de forma absoluta depósitos de feldespato en la costa de Chipre. No obstante, aunque los resultados son bastante fiables, ha podido haber modificaciones como infiltraciones de carbonato cálcico (CaCo3), lo que quiere decir que aun puede haber un margen de error.

Referencias:
·Evangelos Tsakalos,  Constantin Athanassas1, Polychronis Tsipas, Maria Triantaphyllou, Maria Geraga, George Papatheodorou, Eleni Filippaki1, John Christodoulakis1 & Maria Kazantzaki1. 2018. Luminiscence geochronology and paleoenvironmental implications of coastal deposits of Southeast Cyprus.  Archaeologicical and Anthropological Sciences. 10, 41-60

El dinosaurio más cool

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Dinosaurio moderno y sus plumas iridiscentes

La más reciente incorporación en el mundo de los dinosaurios tiene una serie de características un tanto peculiares. La especie en cuestión es Caihong juji, y forma parte de un grupo de pequeños dinosaurios tipo pájaro que vivieron durante el periodo Jurásico en la zona que ahora consideramos China.



Este dinosaurio era pequeño y similar en tamaño a un pato, con una cresta ósea y largas plumas. Estas son la característica más llamativa de esta nueva especie, ya que, basándose en análisis de sus plumas fosilizadas, los investigadores han llegado a la conclusión de que eran iridiscentes aquellas que se encontraban en su cabeza, alas y cola. Estos innovadores colores brillaban e incluso cambiaban con la luz, y han sido el más antiguo hallazgo de este tipo en la historia.


Su nombre se traduce del mandarín como “aircoiris con una gran cresta”, y no podrían haberlo descrito mejor.


La profesora Julia Clarke de la universidad de Austin, Texas, asegura que esta coloración iridiscente está ligada con la selección sexual y la señalización, utilizada inicialmente por los dinosaurios.


Los restos de Caihong juji fueron hallados por un granjero en la provincia Hebei de China en 2014. Se encontraban en una losa de piedra y formaban un esqueleto casi completo rodeado de impresiones hechas por sus plumas. Estas conservaban la forma de los melanosomas, que son estructuras que contienen pigmentos y que se pueden encontrar de diferentes formas que afectan cómo los colores reales de las plumas son percibidos. De esta manera, los melanosomas encontrados en las plumas iridiscentes tienen forma de plaqueta o “pancake”. Los paleontólogos compararon la forma de los melanosomas encontrados en Caihong juji con aquellos que se encuentran en pájaros actuales y llegaron a la conclusión de que se parecían de una manera significante a aquellos encontrados en las plumas iridiscentes de los colibríes.


Comparación de melanosomas: arriba los de Caihong juji, abajo los de colibríes.
Aparte de sus llamativos colores, lo que más llamó la atención de los investigadores fueron las características tanto modernas como antiguas de este peculiar dinosaurio.  “Además de hacer los ecosistemas Jurásicos de hace 161 millones de años más coloridos, Caihong juji es interesante porque posee características tanto antiguas como modernas. La cresta ósea es una característica raramente vista en dinosaurios de las eras más tempranas, mientras que las plumas de su cuello muestran evidencia de los melanosomas que probablemente representen la primera aparición de iridiscencia similar a la de una variedad de especies de colibrí que encontramos hoy en día.” Coautor Profesor Xing Xu, del Instituto de Paleontología y Paleoantroplogía Vertebrada de la Academia China de las Ciencias.

Caihong juji es también el primer animal conocido con plumas asimétricas. Esta característica está presente en los pájaros modernos y la utilizan para dirigir su vuelo. Sin embargo, los dinosaurios no podían volar, por lo que esta especie utilizaba este tipo de plumas tanto para atraer a sus parejas como para mantenerse calientes. Mientras que en los pájaros que encontramos hoy en día estas plumas asimétricas se encuentran en el filo de sus alas, en Caihong juji se hallaban en su cola.



Según el profesor Xing Xu, esta especie destaca incluso entre sus parientes más cercanos. Mientras que otros dinosaurios tienen cráneos triangulares y unos huesos de los antebrazos más largos, este dinosaurio tenía un estrecho y largo cráneo y unos huesos de los antebrazos más cortos, ambos muy semejantes a los de los pájaros de hoy en día. Esta combinación de rasgos es bastante inusual. Su cráneo recuerda al del Velociraptor e incluso tenían una gran cola en forma de ventilador. El profesor Xing Xu opina que su aspecto puede ser muy “guay” o un tanto espeluznante, dependiendo de tu propia perspectiva. ¿Tú que crees?

Bibliografía: 
http://www.sci-news.com/paleontology/caihong-juji-jurassic-bird-like-dinosaur-iridescent-feathers-05637.html
https://www.fosil.cl/caihong-juji/

http://blogs.discovermagazine.com/deadthings/2018/01/15/caihong-feathered-dinosaur/#.WpREolTOXct

Por la boca evoluciona el... ¡insecto!

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A traves de la historia del planeta, las especies fueron evolucionando y distribuyendose por la Tierra sufriendo cambios y adaptandose a las diferentes condiciones que se dieron en cada época. Fué en el Devónico, hace unos 410 M.a, cuando los primeros animales salieron del agua y se puede comenzar a hablar de los animales terrestres, estos primeros individuos fueron principalmente reptiles y artrópodos, entre ellos los insectos(aunque la mayoria de insectos que conocemos actualmente vivos provienen de hace 250 M.a), esos pequeños(o no tan pequeños...) animales que mucha gente tiene fobia, repelús y teme mientras que otros observamos, cogemos y adoramos esos animales que pueden parecer molestos e inutiles, pero que tienen tanta importancia o más que muchas otras especies y son los formadores de una de las clases más grandes y diversas que hay en el planeta: Insecta.




Tras esta super clase, hay una serie de eventos y cuestiones muy interesantes que son explicadas a traves de la paleontología como: ¿Cuándo y cómo aparecieron las alas en los insectos? ¿Insectos gigantes? ¿A partir de que criterios se pueden clasificar los insectos? ¿Qué es el ámbar y que información nos da de los insectos? Así que por todo esto y más, voy a hablar de ellos en mis entradas del blog.

Paleontología e insectos
Hasta la actualidad, la gran parte de los estudios y clasificaciones que se habían hecho, eran en relación a la taxonomia conocida a traves de la paleodiversidad, es decir, la ofrecida por la variedad de fósiles y otros restos paleontológicos como el ámbar, estas clasificaciones y definiciones de cada fosil son complejas y hay diferencias según los autores.
En la actualidad, las nuevas técnicas paleontológicas, permiten crear arboles filogenéticos completos a partir de fósiles, junto a información de avances y descubrimientos recientes sobre los insectos gracias a los yacimientos de fósiles de los que se consiguen sacar restos muy bien conservados.

Estos hallazgos y avances han facilitado y llevado a poder establecer una nueva clasificación según diferencias morfológicas, específicamente a partir de las diferencias que aparecen en las "bocas" de los insectos que han ido evolucionando a lo largo del tiempo junto al resto de especies adaptandose a las nuevas condiciones que se planteaban, por ejemplo, una de las causas que dió lugar a un cambio grande en la estructura de la boca de los insectos fue la aparicion de las angiospermas, las plantas con flor y su dispersión.

La clasificación según las partes bucales
Esta clasificación se lleva a cabo a través de un nuevo método que es el WAPUM en el cual los caracteres se basan en jerarquía y se establecen las diferentes épocas geológicas según la ausencia o presencia de una estructura bucal. Además, evitando agrupar tipos de piezas en clases ya que puede dar lugar a errores juntando insectos que filogeneticamente sean diferentes y no reconocer correctamente las adaptaciones análogas pero no homólogas.

Tras la aplicación de este novedoso método de clasificación de insectos se determinaron 57 tipos de partes de la boca y su distribución a través de las diferentes épocas en una gráfica:
 
En la grafica se muestra cada parte bucal y una línea temporal, las líneas negras muestran presencia de fósiles que portan esa pieza bucal determinada en esa época y las lineas azules muestran la presencia de fósiles que se conoce que tienen esas piezas bucales determinadas pero que no las conservan.
Este modelo presenta algunos pequeños fallos en épocas como en el final del Devónico y comienzo del carbonífero o en el jurásico donde se observa que hay pocas lineas que los alcancen, esto es debido a que de esoas épocas apenas hay fósiles.

Dos observaciones que llaman la atención son: que no se reflejan las grandes crisis de biodiversidad y extinciones que ha habido en la tierra, los diferentes tipos de partes bucales se mantuvieron en su mayoria, solo 5 de ellas se extinguieron y la otra observación es que de los diferentes tipos bucales, la mayoria(88%) de los actuales aparecen junto a la aparición de las angiospermas en el jurásico medio.


Por último, este gráfico además muestra 4 épocas(cada una de ellas con diferencias dentro de estas) en los cuales se ve mayor diversidad de tipos de piezas bucales, que son: el final del carbonífero, mediados y finales del triásico, mediados del jurásico y durantes comienzo mediados y finales del cretácico.


-Final del carbonífero: esta primera dispersión vino ligada a la aparición de las primeras larvas carnívoras, de los fitófagos(mucha proliferación de plantas) y de los insectívoros.

-Mediados y final del triásico: proliferación asociada a fitófagos principalmente, aparecen los nectívoros y las trompas con las que extraían el polen.

-Mediados y final del jurásico:proliferan los tipos bucales relacionados con las flores y gimnospermas que seguirá evolucionando y ademas aparecen nuevos tipos que se relacionan con el parasitismo(por larvas) y la absorción de sangre.

-Comienzos del cretácico: aparecen las mandíbulas usadas como defensa típicas en termitas, las trompas típicas de las moscas y otras piezas especializadas en succión además de otras de depredadores.

Y esto es todo por hoy... espero que disfruteis de la entrada y ¡hasta la próxima!

Referencias
Nel, P., Bertrand, S. and Nel, A. (2018). Diversification of insects since the Devonian: a new approach based on morphological disparity of mouthparts. https://www.nature.com. Available at: https://www.nature.com/articles/s41598-018-21938-1 

Grimaldi, M.S. Engel. (2005). Evolution of the Insects.Cambridge University Press.













¿Eres miope? Pues échale la culpa a la evolución.

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Resultado de imagen de Daniel Lieberman      Daniel Lieberman, un reconocido paleoantropólogo y profesor de Biología Evolutiva en la Universidad de Harvard, es conocido por sus reflexiones sobre nuestro desarrollo como especie: desde las adaptaciones locomotoras de los primeros homininos, su dieta y sus modos de vida hasta los importantísimos cambios culturales y sociales asociados, entre otros, a la invención de la agricultura o la Revolución Industrial. Lieberman, representando a Charles Darwin en el siglo XXI, nos habla de la importancia de la selección natural y de los procesos adaptativos que han configurado la biología de nuestros cuerpos.
      Uno de sus argumentos clave es que la salud de nuestras sociedades se resiente cada vez más por culpa de la llamada hipótesis desadaptativa. Este es un concepto esencial en el emergente campo de la medicina evolutiva, disciplina que aplica las ideas desarrolladas por la biología evolutiva. Es innegable que crecen las enfermedades como la diabetes de tipo 2, la obesidad, la ansiedad y la depresión; y lo mismo pasa con el insomnio, el dolor de espalda, las alergias o la miopía. Todas ellas son dolencias de una ínfima relevancia, casi desconocidas, en las sociedades de cazadores-recolectores que aún subsisten en nuestro tiempo. En el caso concreto de la miopía, afecta al 47% (casi la mitad) de los jóvenes de entre 25 y 29 años en Europa. 
Resultado de imagen de miopía

      En el caso de la miopía, no obstante, dado que los genes de la gente no han podido cambiar en tan poco tiempo como son estos últimos siglos,  la reciente epidemia de miopía debe resultar por tanto de factores ambientales. Dentro de estos factores, podemos destacar la vida cómoda y moderna de interiores y las largas horas de lectura. Esta epidemia visual del siglo XXI (se estima que en 2020 un tercio de la población mundial será miope) se debe sobre todo al hábito de mantener la vista fija durante largos periodos en imágenes cercanas, como las palabras escritas en una página o en una pantalla. 

      Sin embargo, existe una sustentación paleontológica para la existencia de la miopía. Emiliano Bruner, José Manuel de la Cuétara, Michael Masters, Hideki Amano y Naomichi Ogihara presentaron dos estudios de casos donde la información paleontológica podía agregar enfoques complementarios para la comprensión de los procesos detrás del origen y etiología de dos patologías generalizadas: la miopía y la enfermedad de Alzheimer. 
Resultado de imagen de cráneo homo neandertal
      En cuanto al tema que nos ocupa, la miopía, los seres humanos hemos experimentado una historia morfológica única entre los mamíferos, con millones de años de expansión cerebral y reducción del prognatismo facial que han provocado que los ojos y las órbitas descansen directamente debajo de la corteza frontal. Ciertas formas de reducción de la agudeza visual pueden estar relacionadas con la competencia entre los tejidos blandos de los ojos y los duros de los huesos de las órbitas.En los neandertales, la encefalización de los homínidos se ha traducido en una serie de modificaciones en la bóveda craneal, base craneal, y cara. Una posición más anterior y el desarrollo lateral de la corteza prefrontal sobre los ojos, la expansión de los lóbulos temporales y la reducción del prognatismo facial, pueden perjudicar la agudeza visual, ya que limitan el desarrollo orbital y ocular. Se manifiesta un marcado incremento en las proporciones generales, con áreas prefrontales relativamente más anchas en la tapa de Broca, en comparación con otras especies humanas. Es probable que la redistribución lateral de esta masa cortical esté relacionada con las restricciones entre cerebro y estructuras craneales, y, en particular, restricciones impuestas por la arquitectura facial. Las restricciones sobre las órbitas y los tejidos blandos de la vista, asociada con la expansión y reubicación anterior de los lóbulos frontal y temporal, podría haber sido más severa en los humanos modernos, y en los Neandertales más que en los homínidos de pequeño cerebro, como resultado de la relación espacial única entre estos rasgos anatómicos en estos grupos.

      Estos cambios evolutivos, además de una disminución comprobada en el volumen orbital desde el Neolítico en China, son las tendencias más importantes a tener en cuenta en la investigación de la mayor frecuencia y gravedad de ciertas formas de reducción de la agudeza visual como la miopía y el astigmatismo.
  
      Para aclarar un poco todo el tema paleoantropológico, os dejo un vídeo que lo explica bastante bien aquí

      Bueno pues hasta aquí el post, espero que os guste y lo encontréis interesante. Los próximos posts estarán dedicados también a temas relacionados con la biología evolutiva, como este.

      REFERENCIAS:
      
      http://paleoantropologiahoy.blogspot.com.es/2014/05/origen-evolutivo-de-miopia-astigmatismo.html

      https://www.muyinteresante.es/revista-muy/noticias-muy/articulo/eres-miope-la-culpa-es-de-la-evolucion-411460704529

      http://endmyopia.org/story-of-the-human-body-harvard-evolutionary-biologist-daniel-lieberman-discusses-myopia/



Oviraptor visita al dentista.

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Los Ovirraptorosaurios, que significa "reptiles saqueadores de huesos", eran Terópodos desdentados y vivieron en el Cretácico tardío en Mongolia. Incluía algunas familias como la de los Cenagnátidos,de la que en esta entrada vamos a hablar especialmente debido a un reciente estudio.
En el artículo "Reevaluation of the Dentary Structures of Caenagnathid Oviraptorosaur"(2018)  escrito por Shuo Wang, Qiyue Zhang y Rui Yang, se recoge una nueva perspectiva sobre la estructura dentaria de los Cenagnátidos.

 Resultado de imagen de caenagnathidae
Caenagnathidae es un clado monofilético de terópodos oviraptorosaurios caracterizado por estar desdentados, tener una fosa profunda en la superficie lateral de la dentadura, una extensión ventral del ilion y una fosa medial en el pedúnculo isquiático del pubis. Actualmente, se describen principalmente a partir de regiones fragmentarias sinfíticas de dentaduras fusionadas y elementos postcraneales disociados. Además son bien diferenciados por la depresión en forma de reloj de arena en la superficie ventral y los surcos anteriores y laterales presentes en la superficie de su dentadura. 

Estas distintas ranuras oclusales laterales separadas entre sí por las crestas han sido motivo de estudios desde hace tiempo. Sternberg sugirió que las estructuras podrían ser vestigios alveolares, mientras que Currie las interpretó más tarde como un soporte estructural. Aunque varios autores han mencionado estas estructuras, aún no existe un consenso sobre su naturaleza y función. 
Imagen relacionada

Un estudio reciente sugiere que los surcos y crestas laterales son alvéolos vestigiales y tabiques interdentales, respectivamente. Apesar de la nueva teoría, la importancia de estos tejidos periodontales siguen sin quedar claros. 

El objetivo del estudio. 


Esta nueva reevaluación trató de volver a describir un pequeño ejemplar de Cenagnátido. El Instituto de Paleontología y Paleoantropología de Vertebrados, Academia China de Ciencias investigó su morfología interna mediante técnicas de CT scaner y reconstrucción 3D. 
La evidencia disponible sugiere que los alvéolos vestigiales se han modificado parcialmente en estructuras que alojan los vasos sanguíneos que nutren tras la pérdida de los dientes.

Estas son las imágenes tomadas con CT a partir de las cuales desrrollaron estas nuevas ideas y posibles conclusiones:

Figure 1

La superficie lateral de la dentadura es generalmente lisa excepto dos series lineales que suponen el estrechamiento de la médula espinal. CT imágenes muestran que toda esta foramina sobre la superficie externa de la dentadura proviene del espacio hueco del interior del hueso, que habrían llevado tubos capilares y nervios.


Figure 2
A partir de estas imágenes de CT de Caenagnathiasia sp. IVPP V20377, se reconocen varias características previamente desconocidas, como los alvéolos vestibiales crateriformes, la morfología del espacio hueco interior dentario y los tubos ciegos emparejados debajo de la plataforma dentaria. 

Las líneas de evidencia actuales sugieren que las diferentes morfologías de los huesos de la mandíbula probablemente sean producidas por varios patrones de reducción dental, lo que indica un cambio dietético ontogenético, una vez presentado en Cenagnátidos ySapeornis; que puede haber sido diferente de la condición observada en Limusaurus (dinosaurio terópodo ceratosauriano, que vivió a principios del período Jurásico).
Las imágenes tridimensionales de los espacios interiores dentarios sugieren que mientras progresa la reducción de los dientes, los alvéolos vacíos se modifican parcialmente en estructuras que alojan vasos sanguíneos, lo que probablemente representa una compensación funcional por el suministro insuficiente de sangre en los huesos de la mandíbula dentada.


Resultado de imagen de Caenagnathid Oviraptorosaurs

No podemos negar el divertido aspecto de este dinosaurio, que ya ponía de moda la fiebre punki allá por el Cretácico. En próximas entradas indagaremos un poco más a fondo sobre él y su familia.


  • J. Mauricio M. Herrera C. La Clasificación de los Dinosaurios. Universidad Nacional Autónoma de México.

El misterio de la muerte de los mamuts machos

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Los mamuts lanudos machos de la Edad de Hielo morían "de manera estúpida" más a menudo que las hembras, según un estudio.


La sabiduría de madres, abuelas y esposas es proverbial, siempre recordando cosas que olvidamos o que debemos hacer, sin embargo, en el caso de los mamuts lanudos, una especie cuya extinción ocurrió hace 3.700 años, el liderazgo de las hembras más adultas de la manada marcaba la diferencia entre la vida y la muerte.


Se cree que la mayoría de los mamuts morían atrapados en ciénagas o en dolinas, arrastrados por avalanchas de lodo o incluso ahogados al caer al agua tras romper una capa fina de hielo. Estos son los destinos que muchos desafortunados mamuts sufrieron en Siberia hace miles de años. Sus fósiles bien conservados han permitido a los paleobiólogos obtener una visión bastante precisa de sus vidas prehistóricas.


Resultado de imagen de mamut  ice age
Ahora, después de realizar un análisis genético de los restos de las víctimas de estas trampas naturales, un equipo de científicos realizó un sorprendente descubrimiento: la mayoría de estos ejemplares eran machos, informa 'The New York Times'.
"En muchas especies, los machos tienden a hacer cosas un poco estúpidas que terminan por matarlos de manera tonta, y parece que también ocurría lo mismo con los mamuts", afirma al diario Love Dalen, biólogo evolutivo del Museo Sueco de Historia Natural.


En un estudio publicado en la revista Current Biology, Dalen y sus colegas analizaron el ADN de huesos, dientes y colmillos de 98 mamuts lanudos y descubrieron que el 69% de las muestras pertenecían a ejemplares macho.
El hallazgo fue un accidente, según Patrícia Pečnerová, estudiante de doctorado de la Universidad de Estocolmo y autora principal del estudio. Llegó mientras ella estaba ingresando datos para un proyecto diferente sobre la genética de mamut.
"Al completar esto en la hoja de cálculo, vimos que había demasiados hombres, más de los que debería haber", dijo. "Realmente nos sorprendió ver que había más del doble de hombres que de mujeres porque no había investigaciones previas o indicaciones de que ese debería ser el caso".
Un estudio previo de restos de mamut, en Hot Springs, S.D., descubrió que entre 14 especímenes muertos, 13 eran machos adultos jóvenes y solo uno era hembra. Pero el estudio de la Sra. Pečnerová investigó la proporción de sexos utilizando la genética.













Colmillo de mamut encontrado en Chukotka, Siberia, por los investigadores Patrícia Pečnerová y Love Dalén en su viaje más reciente al campo. 



Los 98 especímenes que el equipo había analizado procedían de la parte norte de Siberia y se habían recogido a lo largo de cuatro décadas. Los más viejos tenían más de 60,000 años, y el más joven, un espécimen conocido como "Lonely Boy", tenía alrededor de 4,000 años de edad. Los datos genéticos no proporcionaron información sobre la edad de los mamuts cuando murieron, solo su sexo.

Para obtener el ADN, el equipo primero tuvo que limitar la contaminación. Para eso, trabajaron en un laboratorio limpio y usaron trajes de laboratorio similares a los que usan los médicos del Ébola. Se afeitaron unos milímetros de la superficie de sus muestras y luego perforaron en ellos para extraer datos genéticos. Descubrieron que 66 eran hombres y 29 mujeres.

Los expertos especulan que la razón de esta proporción de sexos inusualmente sesgada pueda tener que ver con su comportamiento imprudente. Al igual que los elefantes salvajes de hoy en día, los machos jóvenes de mamuts de la Edad de Hielo probablemente vagabundeaban solos y se metían con mayor frecuencia en situaciones arriesgadas. En ocasiones se ahogaban en lagunas, en otras eran arrastrados por ríos o quedaban atrapados en dolinas que preservaron sus huesos durante miles de años, apuntan los científicos.

Las hembras, por el contrario, solían moverse en un grupo liderado por una matriarca mayor que conocía el terreno y mantenía a sus compañeras alejadas de peligros.


"Sin la ventaja de vivir en una manada dirigida por una hembra experimentada, los mamuts machos habrían corrido un mayor riesgo de morir en trampas naturales como pantanos, grietas y lagos", explica Dalen.


Las trampas naturales enterraron sus cuerpos rápidamente, protegiéndolos de carroñeros. Los investigadores dijeron que sus hallazgos no dicen nada sobre la proporción de sexos de los mamuts cuando estaban vivos, que creen que podrían haber sido 50-50, solo que los hombres tenían más probabilidades de morir de manera que mantuvieron sus restos preservados durante miles de años.



Beth Shapiro, bióloga molecular evolutiva de la Universidad de California, Santa Cruz, que no participó en el estudio, dijo que estaba sorprendida por los resultados y que la hipótesis del equipo era sensata dado lo que sabemos sobre el comportamiento de los elefantes. Añadió que sería interesante ver si existe una diferencia en la proporción de sexos para otros mamíferos prehistóricos preservados en el permafrost, como bisontes y caballos.

Daniel Fisher, un paleontólogo de la Universidad de Michigan, dijo que la hipótesis estaba bien fundada, pero que los colmillos no deberían haber sido utilizados en el estudio porque los hombres a menudo se rompían los colmillos mientras luchaban entre ellos, pero eso no significaba que murieran.

Los autores dijeron que, incluso descontando sus fragmentos de colmillos y solo utilizando dientes, huesos y muestras de cabello, todavía tenían más machos muertos.




Referencias

Hace 110 millones de años los lagartos podían correr en dos patas!

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INTRODUCCIÓN


A pesar de que los lagartos son los más sobresalientes de los reptiles modernos en términos de número de especies (más de 5800 especies existentes) y su extensa distribución geográfica, su record de fósiles es relativamente pobre con respecto a ambos, esqueletos y rastros. Esto es, en general porque sus cuerpos pequeños requieren de un ambiente deposicional adecuado para su preservación. Grupo-corona Squamata se originó entre el triásico tardío y principios del jurásico(213-176 Ma) basado en las moléculas y fósiles. Algunos materiales esqueléticos de Iguana, Guecos, Scincoidea,Lacertoidea, y Anguimorpha han sido reportados en Asia, Europa y Norte América por el cretácico temprano. Desafortunadamente, los records de la huella de fósiles atribuye que los lagartos son aún más raros que esos de cuerpos fósiles debido al peso ligero del cuerpo de los lagartos y sus preferidos rangos de hábitats. Por lo tanto hay solo tres reportes previos de rastros de fósiles de lagarto. Dos fueron atribuidos a un lagarto sin una descripción de la formación del río verde del Eoceno, Utah: uno es un seguimiento de lagarto y el otro es una rastro aislado. Un nuevo seguimiento de lagarto, Neosauroides koreaensis, fue recientemente nombrado desde "The Haman Formation" de Corea del Sur.

Aquí describimos el seguimiento del grupo-corona de lagartos conocidos por cualquier parte del mundo el cual muestra una locomoción bípeda. Las huellas vienen desde "The Hasandong Formation", Corea del Sur los cuales son extraordinariamente bien preservados y permiten la identificación de una detallada anatomía del pie. Asociados con una completa huella manuscrita, la mayoría de las huellas son muy pequeñas (menores a 26mm) y aparecen como ectaxónicos y huellas asimétricas las cuales son muy frecuentemente reconocidas como una característica de diagnóstico del "típico" lagarto pes. Muchos lagartos modernos pueden corrar bipedalmente en la tierra y incluso en la superficie del agua(Basiliscus basiliscus, el "lagarto Jesús"). Sin embargo, ha sido poco claro cuándo han desarrollado los lagartos la capacidad de una locomoción bipeda, a pesar de que esto ha sido inferido en algunos fósiles de lagarto basado en la relación entre la longitud de su extremidad anterior y su miembro posterior. Por lo tanto, el descubrimiento descrito en este reporte es altamente significativo porque es una de las primeras evidencias directas de la locomocíon bípeda en fósiles de lagarto, sugiriendo que el bipedismo del lagarto está profundamente arraigado en la filogenia de la evolución del lagarto.

Descripción

El bloque contiene 29 huellas de lagarto sin ningún otro trazo de vértebra. Son preservados como depresiones y no son marcas. A pesar de que algunas huellas están superficialmente deprimidas y son de un tamaño muy pequeño, la calidad de las impresiones de la anatomía del autopod  en algunas huellas en lo suficientemente bueno para proveer descripciones detalladas.
Figura 1

Basados en la morfología de la huella, dos diferentes tipos de huellas son observadas en este bloque. Un tipo (N=25, pes huella) tiene dígitos de huellas curvadas que incrementan progresivamente en longitud desde los dígitos I a IV, un dígito más pequeño V que es separado distintivamente de los otros dígitos por un largo ángulo interdigital, y el dígito V es orientado más lateralmente. El otro tipo (N=4, manuscrito de huellas) es mesaxónico, teniendo un dígito más largo III comparado con los otros(dígitos I, II, IV, V). El manuscrito y longitud pes promedio es de 19.18 mm y 22.29 mm, respectivamente(heterópodo). A pesar de que los conjuntos manuscrito-pes no son regularmente impresos, las huellas visibles en el bloque muestra claramente el patrón de locomoción sin rastros de cola.
Figura 2


Las huellas dactilares pes son plantígrados, pentadactilos, y distintamente ectaxónicos (Figs 2b, 3). Impresión del dígito I es el más corto (promedio 4.34 mm) y dígito II, III, y impresión IV (7.07 mm, 12.84 mm, y 15.80 mm, respectivamente) aumentan progresivamente en su longitud. Dígito V (9.48 mm) es más corto que el III y IV, pero más largo que el I y II. Impresión de dígito I está orientada medialmente (A6, Fig, 2b) o anteromedialmente (A3, B8, Fig, 3a, b). Impresión del dígito V es distintivamente separado de otras impresiones y está conectado con la parte de atrás del rastro de talón. La divergencia de las impresiones del dígito I y el V es menor que 90 grados. La impresión del metatarso es elongado y localizado detrás del dígito I a IV. Esto es ligeramente aumentado en relación a la impresión del dígito, con la unión del área metatarsofalángica la más profundamente impresionada, especialmente en dígito II, III y IV.




Referencias

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    Vitt, L. J. & Caldwell, J. P. Herpetology: an introductory biology of amphibians and reptiles. 1–776 (Academic Press, 2013).

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    Lockley, M. G., Ritts, B. D. & Leonardi, G. Mammal track assemblages from the early Tertiary of China, Peru, Europe and North America. Palaios 14, 398–404 (1999)

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¿Afectó la temperatura corporal al gran tamaño de los antiguos tiburones?

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¡Hola a todos! Empiezo tratando mi articulo con un tema que puede hacer que algunos (incluido yo) le cojamos fobia a ir a la playa estas vacaciones, y es que voy a empezar hablando de... ¡tiburones!
Sí esos grandes ''dinosaurios marinos'' que a día de hoy siguen dominando casi todos los océanos de la tierra, y que durante millones de años han poblado los mismos sin apenas muchos cambios en su evolución considerandose verdaderos ''fósiles vivientes''.

Y bien, para empezar nuestro hilo, en el artículo de este post empezaré desarrollando una de las hipótesis planteadas acerca del gran tamaño o gigantismo de algunas especies (ya extintas) de algunos tiburones macrodepredadores de la familia (y que gran familia) de los Otodontidae, que incluye al género de los Odontis,en el cual podemos incluir a su vez a la especie de Otodus Obliquus, la cual es considerada el ancestro mas directo de el gran megalodón (Carcharadon Megalodon).
 Podemos decir que el primero vivó hace unos 44 y 55 millones de años, durante el Paleoceno y el Eoceno, mientras que a nuestro megalodón le podemos situar muchos años mas tarde aproximadamente entre 19,6 y 2,6 millones de años durante inicios del mioceno hasta el final del Plioceno.(Menos mal que nuestros Australophitecus decidieron quedarse en tierra, si no si que hubieran vivido un verdadero ''terror'' al mas estilo de ``Steven Spielberg´´).
El gran tamaño de estos restos, incluidos los dientes que alcanzan hasta 168 mm de altura, ha despertado el interés en los diversos grupos de paleontologos y cientificos. En consecuencia, varios autores han intentado establecer relaciones alométricas precisas entre la altura del diente (o ancho del centro vertebral) y la longitud del cuerpo, y entre la longitud corporal y la masa corporal en tiburones existentes con el objetivo de inferir tamaños y masas de otodóntidos. Las estimaciones más aproximadas para la longitud corporal del "Megalodon" conocido popularmente son de unos 16 metros (no tan grande como nos lo pintan en la cultura popular,pero si un par de metros superando a su compañero en tamaño vivo actualmente, el tiburón ballena) lo que lo convierte en el tiburón megapredador más grande conocido entre taxones fósiles y existentes. Sin embargo, es sorprendente la escasez de estudios que aborden los factores que permitieron que los tiburones de esta familia alcancen tamaños tan grandes

Las razones que subyacen a su gigantismo, patrones de distribución, y extinción, se han relacionado clasicamente con los factores climaticos y la evolucion y migración de los cetáceos durante el Paléogeno. Sin embargo, la mayoría de estas propuestas anteriores se basan en la idea de los otodóntidos como tiburones ectotérmicos, independientemente de las limitaciones ecológicas, energéticas y de tamaño corporal que esto implica.
Valorando estudios recientes, se ha sugerido la posible existencia de endotermia (más conocido como ''sangre caliente''), en estos tiburones abriendo así la puerta a una serie de nuevas interpretaciones. Estas proponen que la endotermia regional estaba presente en los otodóntidos y algunos taxones estrechamente relacionados (cretoxirhinidos), desempeñando un papel importante en la evolución del gigantismo y en permitir un modo de vida activo.La existencia de endotermia regional en estos grupos es apoyada por tres enfoques diferentes que incluyen aproximaciones isotópicas, inferencias de velocidad de nado y la aplicación de una metodología novedosa para evaluar el presupuesto energético y el costo de la natación en taxones extintos.

Estas tres líneas independientes de evidencia (es decir, datos isotópicos, estimaciones de velocidad de nado e inferencias metabólicas) apoyan firmemente la hipótesis de partida de este trabajo, fortaleciendo la evidencia de la existencia de endotermia regional en otodontos y cretoxirinidos. La detección de esta adaptación en tales grupos extintos conlleva una serie de implicaciones, algunas de ellas con importante significación en distintas disciplinas.




Como conclusión de los resultados, a partir de los metodos planteados, podemos plantear que los tamaños gigantescos alcanzados por algunos otodóntidos fueron el resultado de una tendencia evolutiva hacia tamaños corporales más grandes, es decir se esperaría una tendencia a estilos de vida menos activos en especies más grandes si todos los otodontes compartieran el mismo nivel metabólico. Este fenómeno está bien documentado en la evolución de los misticetos, donde las pequeñas formas basales extintas eran activamente carnívoras, mientras que las especies gigantes más derivadas son filtradores lentos (y las formas de tamaño intermedio eran probablemente filtradores facultativos).


Sin embargo, la existencia de estilos de vida macropredatorios similares en todas las especies de otodóntidos implica que formas más derivadas y más grandes tendrían niveles metabólicos más altos y, por lo tanto, la tendencia al gigantismo debería ir acompañada de una tendencia hacia una endotermia mejor desarrollada. Los factores que promovieron esta tendencia al gigantismo son poco conocidos. Se ha argumentado recientemente que este fenómeno podría ser el resultado de una presión selectiva a largo plazo sobre los otodóntidos que favorecen formas más grandes con un rango más amplio de presas. Por otro lado, el hecho de que los otodóntidos crecieron en tamaño proporcionalmente a los cetáceos durante el Neógeno, también podría sugerir que el gigantismo coevolucionó en ambos grupos como resultado de una carrera evolutiva entre depredadores y presas.


En cualquier caso, la adquisición de estructuras anatómicas y mecanismos fisiológicos que permitieron la endotermia regional en cretoxirinidas probablemente desempeñó un papel clave en la historia evolutiva posterior del linaje, actuando como desencadenante de la evolución del gigantismo en otodontidos más derivados, permitiendo estilos de vida macroporéticos activos y ayudarlos en la lucha por la supervivencias.


Y bueno chicas y chicos, hasta aqui el post de hoy, espero que os haya interesado como a mí, y hayáis podido comprender cientificamente un poquito más y llegado a conocer las causas sobre la evolución y origen de esta gran especie (literalmente), tan mitificada en la ciencia ficción y el imaginario popular.

Un saludo, ¡y nos vemos en el siguiente post!



Referencias:

 -Ferrón HG (2017) Regional endothermy as a trigger for gigantism in some extinct macropredatory sharks.

 PLoS ONE 12(9): e0185185. 

  • https://doi.org/10.1371/journal.pone.0185185

Article 1

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EL DINGO, EL MEJOR AMIGO DEL SER HUMANO



               Nos adentramos en la larguísima historia de una comunidad en tierra lejana: la comunidad de los Martus en Australia. Sí, larguísima. Aunque ciertos libros de historia prefieran comenzarla con la llegada de los europeos, en Australia ya se había creado una historia propia de sus gentes.
          En esta primera entrada del blog me gustaría visibilizar la importancia de las costumbres y prácticas que llevaban a cabo las comunidades aborígenes en Australia, y realzar cómo mediante colonizaciones y silenciamientos se han ido perdiendo (y, con ellas, el conocimiento ancestral sobre la tierra y sus habitantes).


                  Basándome en el experimento realizado por Rebecca Bliege Bird, Douglas W. Bird, Luis E. Fernandez, Nyalanka Taylor, Wakka Taylor y Dale Nimmo en una de las únicas zonas en que se siguen llevando a cabo estas prácticas, me voy a centrar en los incendios provocados por aborígenes, y en cómo éstos han regulado durante tantísimos años el equilibrio entre especies.
          El desierto del oeste se ocupó por primera vez a finales del Pleistocénico, hace entre 40000 y 50000 años; teniendo en cuenta que durante los últimos 9000 años de la etapa se dio un aumento de la población a finales del Holocénico. Esto hace que la región tenga una larga historia de ‘incendios aborígenes’(o, como Rhys Jones acuñó, ‘agricultura del palo incendiario’), quizá intensificados posteriormente por las condiciones climáticas que el fenómeno de “El Niño” causa (hace entre 4500 y 2000 años).


             Los Martu (incluyendo aquí a los grupos lingüísticos de Manyjiljarra, Warnman, y Kartujarra) vivieron en la región hasta 1966, cuando las últimas bandas nómadas abandonaron la zona. Regresaron para reocupar el área en 1984, estableciendo la comunidad de Parnngurr como base para la realización de actividades tradicionales y la ejecución de incendios. No obstante, la caza y las actividades incendiarias se daban, de manera heterogénea, a lo largo de todo el recorrido Australiano. Esta heterogeneidad es lo que permite realizar estudios sobre los efectos de la falta de incendios aborígenes y de la ‘pirodiversidad’ en Australia.
El término ‘pirodiversidad’ se refiere a la heterogeneidad, tanto espacial como temporal, del fuego, así como a los diferentes efectos que tiene sobre el terreno. En lo que se basa el experimento es el aumento de pirodiversidad con la práctica de la agricultura del palo incendiario.
La región donde siguen existiendo incendios aborígenes es la región de spinifex en el desierto Australiano del Oeste. Estos fuegos siguen siendo ejecutados por la comunidad Martu por motivos de subsistencia, lo que hace que el curso temporal de los incendios se parezca al curso histórico antes de la colonización.





                 La región de la que hablamos se trata de la bio-región del “Little Sandy Desert” (El pequeño desierto arenoso al Oeste de Australia), que incluye las tierras a título de los Martu nativos y el parque nacional Karlamilyi.
El clima es caluroso y semi-árido, con unas temperaturas mínimas invernales de entre 10ºC y 12ºC y una media en verano superior a los 40ºC. La vegetación de la zona es predominantemente de spinifex, acacias y eucaliptos en dunas y superficie desértica arenosa. Ésta predominancia se debe a que son éstas las especies que más rápido se regeneran tras los incendios, lo que las hace más fuertes para un terreno en el que los incendios están a la orden del día.             


                La diferencia entre las zonas con la llamada ‘agricultura del palo quemado’ y las zonas sin ella es que en las zonas sin incendios aborígenes los fuegos han pasado a ser incendios de mayor duración y tamaño, y con una estacionalidad muy marcada. Este es el punto al que queremos llegar al hablar de los efectos que ha tenido la falta de la agricultura del palo quemado. Los fuegos más grandes y duraderos favorecen la aparición de depredadores invasivos, que prefieren cazar en zonas recién quemadas, dándoles así una ventaja de subsistencia frente a las especies nativas de la zona.
Esto se debe a que estos fuegos dejan extensas áreas de tierra descubiertas, donde es más fácil cazar a las especies nativas – quienes, a su vez, deben recorrer distancias más largas (exponiéndose más) para alcanzar zonas no-incendiadas.


               Las comunidades aborígenes han establecido una especie de guía que muestra cada etapa en que se encuentra el hábitat, dependiendo de la fase del incendio en que se encuentra:
 Nyurnma: áreas recién quemadas que se convierten en un espacio ideal para que las goannas de tierra hagan sus madrigueras.

 Waruwaru: se refiere a la recuperación vegetal. Cuando, tras algunas lluvias y algo de tiempo, la vegetación comienza a resurgir en una zona post-incendiaria. No obstante, en ocasiones la etapa de Nyurnma permanece durante muchos meses, o incluso años, hasta que la lluvia regrese y pueda comenzar el Waruwaru.

 Nyukura: esta nueva etapa comienza tras Waruwaru, cuando las plantas han madurado y han dado flores o frutos. Se caracteriza por una gran diversidad de especies predominando la mata, la cual ofrece una gran variedad de semillas.

 Manguu: la transición a esta etapa puede durar hasta más de 4 años. En esta etapa se evalúa si la zona está lista para un nuevo fuego o no (si la planta manguu contiene densas matas de spinifex significa que está lista para el fugo).

Kunarka: por último, esta etapa se da en las matas de la planta manguu que han sobrevivido al nuevo incendio.


              Un buen ejemplo de la interacción depredador nativo – depredador invasor – presa nativa es el caso de los Dingos en la caza de especies invasoras de meso-depredadores. Los Dingos, además de alimentarse con la caza de canguros, se alimentan de otros pequeños mamíferos debido a la falta de canguros fuera de ciertas zonas concretas. Esta alternativa alimenticia la encuentran mayoritariamente en el Nyurnma (algo que, si no se dan prisa tras el fuego, deja sin alimento a los Martu). Esto demuestra el efecto positivo de los fuegos en una especie nativa que lleva con la comunidad Martu desde que los Dingos llegaron a Australia, hará 4000 años. Se especula que ésta cercana relación entre Martus y Dingos se debe al efecto positivo que los Martus ejercen sobre los Dingos (ya comentado). Además, se ha estudiado la posibilidad de que los Dingos prefieran las zonas pirodiversas debido a una ventaja en la caza de canguros (los cuales también se han visto beneficiados por la pirodiversidad, como muestran algunos estudios sobre canguros cercanos a zonas rocosas).
 Por último, con este experimento se ha demostrado cómo los Dingos (afectados positivamente por la pirodiversidad) ejercen una ayuda sobre el resto de especies nativas haciendo de depredadores con las especies invasivas de ‘meso-depredadores’. Esto quiere decir que los incendios aborígenes (precursores de la pirodiversidad) afectan de manera positiva tanto a especies nativas depredadoras como presas.






          Como final, me gustaría llamar a las similitudes del caso actual incendiario con el caso de Galicia. Dejo un artículo de "La Voz de Galicia" por si os interesa el tema.:


Además, también dejo el link a un artículo (y al artículo científico en que se basa) que habla sobre cómo una especie de pájaros han aprendido a propagar incendios utilizando el metodo del palo incendiario para, o eso se especula, tener ventajas en la caza de sus presas:




REFERENCIAS

- Rebecca Bliege Bird, Douglas W. Bird, Luis E. Fernandez, Nyalanka Taylor, Wakka Taylor, Dale Nimmo, Aboriginal burning promotes fine-scale pyrodiversity and native predators in Australia's Western Desert, Biological Conservation, Volume 219, 2018, Pages 110-118, ISSN 0006-3207. (http://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0006320717317962)

- Como apoyo: 

Nuevo dinosaurio revela relación entre Europa y África en el Cretácico.

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Durante los primeros años de los dinosaurios, en gran parte de los períodos Triásico y Jurásico, todos los continentes estaban unidos en un solo continente, el supercontinente Pangea.Durante el Cretácico, sin embargo, comenzaron a separarse y a cambiar hacia la configuración actual. Actualmente, no está claro cómo estaba conectaba África con otras masas terrestres del hemisferio Sur y Europa durante este tiempo. No se conoce hasta qué punto los animales africanos pudieron quedar aislados de sus vecinos y evolucionar siguiendo su propio camino. El descubrimiento de Mansourasaurus shahinae, un herbívoro de cuello largo, perteneciente al grupo de los titanosaurios, dinosaurios saurópodos comunes en gran parte del mundo durante el Cretácico, puede ayudar a responder esta cuestión.
https://media.springernature.com/lw582/springer-static/image/art%3A10.1038%2Fs41559-017-0455-5/MediaObjects/41559_2017_455_Fig3_HTML.jpg
Se ha intentado estudiar paleobiogeografía de vertebrados continentales del Cretácico superior de las masas terrestres de Gondwana, pero este estudio esta resutando difícil de probar pues los vertebrados terrestres de los últimos 30 millones de años del Mesozoico son muy raros y dispersos en África continental, por lo tanto, este ejemplar, además de su importancia por ser el ejemplar más completo descubierto hasta el final del Cretáceo en África, posee una gran importancia pues corresponde a la primera evidencia inequívoca de un clado de vertebrados del Cretácico continental posterior al Cenomaniano que habitó tanto en África como en Europa, es decir, estos hallazgos contradicen las hipótesis de que las faunas de dinosaurios de la parte continental africana estaban completamente aisladas durante el Cretácico posterior al Cenomaniens.


https://media.springernature.com/lw582/springer-static/image/art%3A10.1038%2Fs41559-017-0455-5/MediaObjects/41559_2017_455_Fig1_HTML.jpg

Referencias:

https://www.nature.com/articles/s41559-017-0455-5#author-information

Primer yacimiento extenso Achelense en Porto Maior, Galicia.

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Este yacimiento se encuentra en el Concello de As Neves, en la provincia de Pontevedra, cerca de la ribera del río Miño y no lejos de la frontera con Portugal.

Se ha recuperado una acumulación extraordinariamente densa de artefactos de piedra atribuidos sin ningún género de dudas a la tecnología achelense. En pocos metros cuadrados se han obtenido cerca de 4.000 piezas fabricadas sobre todo en cuarcita y cuarzo procedentes de varios niveles arqueológicos. Abundan los bifaces, pero también hay hendedores y picos, las tres herramientas características del Achelense. La datación ha sido realizada por diferentes geocronólogos (se han realizado dataciones absolutas obtenidas por Resonancia Paramagnética Electrónica (ESR) sobre granos de cuarzo ópticamente blanqueados, y por Luminiscencia (pIR-IR) en granos de feldespato sedimentario). El rango temporal de los niveles arqueológicos de Porto Maior se ha estimado entre casi 300.000 y 200.000 años.



              Dibujos de los bifaces, hendedores y picos encontrados en el yacimiento de Porto Maior.



Ahora bien, llegados a este punto, si aún no entiendes qué cara*o es eso de ‘’Achelense’’ o por qué es esto interesante, voy a intentar explicártelo.
Achelense es el término que se utiliza para hablar sobre un tipo de herramientas que se encontraban en el Paleolítico Inferior, caracterizada por los bifaces, hendedores (bifaz al que han dado un golpe oblicuo) y por una elaboración más compleja. Y, ¿por qué es importante esto para nosotros? Pues porque gracias a esto, se han confirmado, o esclarecido al menos, ciertas hipótesis importantes para el entendimiento de esta época.

En primer lugar, este rango de años en los que se ha datado estos artefactos sorprende ya que es en esa época cuando ya se ha establecido la nueva tecnología que caracteriza no solo a los neandertales europeos, sino a otros grupos humanos de la misma época en África y el resto de Eurasia. Es por ello que los autores del artículo apuestan por la presencia en Europa por al menos dos grupos humanos distintos, una hipótesis que se viene proponiendo desde hace más de un par de décadas por el hallazgo de una biodiversidad compleja en el registro de fósiles humanos.
Además, Porto Maior nos muestra una acumulación de herramientas poco habitual y los arqueólogos que firman el artículo vuelven a proponer la vieja hipótesis de la entrada de la tecnología achelense por el estrecho de Gibraltar, ya que además, presentan unos rasgos que recuerdan en mayor medida al Achelense conocido en África. La casi ausencia de herramientas achelenses en la parte más oriental de Europa supone un reto a la hipótesis de la entrada de esta tecnología por el camino más lógico. Los humanos siempre se han movido desde el suroeste de Asia hacia Europa. De hecho, nosotros somos “herederos genómicos” de las últimas migraciones del Neolítico desde el llamado Creciente Fértil. El Achelense se ideó hace más de 1,7 millones de años en África, llegó al Corredor Levantino hace un millón de años y aún tardaría otros 500.000 años en entrar en Europa.

Por tanto de todo esto sacamos que comprender la cronología y el origen del Achelense europeo es de fundamental importancia para desentrañar la dinámica de ocupación humana del Pleistoceno Medio en el continente. Se han propuesto diferentes explicaciones para el surgimiento de la tradición de este tipo de herramientas en Europa. La explicación más ampliamente sustentada sostiene que el origen del Achelense europeo está vinculado a un escenario “fuera de África”, potencialmente uno que invoca una ruta de migración a través del Estrecho de Gibraltar. Una explicación alternativa, aunque menos popular, propone la reinvención local del Achelense, sin una conexión directa con el africano. Según estos datos, cualquier reinvención hipotética de la tecnología Achelense en Europa se habría producido un millón de años después del surgimiento de Achelense en África en un contexto ambiental y tecnocultural diferente, y muy probablemente por una especie humana que era muy diferente del inventor africano (Homo ergaster).


BIBLIOGRAFÍA
http://arqueologiaenred.paleorama.es/2018/02/importante-yacimiento-achelense-de.html




¡VEN A CENAR CONMIGO!

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Artículo principal:
 Witton, M. P. (2018). Pterosaurs in Mesozoic food webs: a review of fossil evidence. Geological Society, London, Special Publications, 455(1), 7-23.



¡Hola blogueros! Hoy voy a daros unos consejos para organizar una cena perfecta si decidís invitar a nuestros ya amigos los pterosaurios.
Sabéis que siempre es difícil acertar con la comida para que todos los comensales salgan agradados de casa. En este caso, lo es aún más si cabe, ya que no están muy claras sus preferencias. Para ello he estado investigando y os traigo lo que podrían ser las claves para conquistar a un pterosaurio por el paladar. 



Si queremos conocer los hábitos alimenticios de los pterosaurios tenemos que recurrir al registro fósil, donde observaremos lo preservado en el intestino, estómago y coprolitos (aunque lo cierto es que de estos últimos hay pocos😟). 
Más adelante veremos que los dientes son también una significativa fuente de información. 

Sin embargo, aunque el registro fósil y el interés hacia nuestros animalitos está creciendo, todavía no hay un número suficiente de fósiles, aun así, encontramos entre los más importantes a Rhamphorhynchus, frecuentes en el Jurásico, (estos fueron consumidos por especies acuáticas, lo que coincide con que quizá tuvieran una vida cercana al medio marino) y los pterosaurios azhdarchid, de los que hablamos en la publicación anterior y que fueron consumidos por dinosaurios y Crocodyliformes, confirmando así su posible vida terrestre. 
¿Y por qué hablamos de los pterosaurios como alimento? Pues porque es importante para saber localizarlos, entre otras cosas!


En general, podemos decir que los pterosaurios podían adaptarse a diferentes dietas, y que la variedad de su estilo de vida dependía en gran parte del vuelo.
 

ENTONCES, YENDO AL GRANO, ¡¿QUÉ LES PODEMOS DAR DE COMER?!

Pues bien, aunque no siempre está claro el contenido intestinal por la conservación de las tripas, algunos alimentos quedaron registrados al ser su textura grabada por los ácidos digestivos. Entre estos ‘grabados’ contamos con las escamas ganoideas atribuidas al género de peces Parapholidophorus.

Para ser más concretos, en fósiles de Rhamphorhynchus se encontraron restos de peces grandes, parcialmente articulados y algo digeridos por la zona del tronco.
Por la forma en la que se encontró, se deduce que fueron tragados enteros y cabeza abajo (ventaja para nuestra cena: no habrá que trocearles el pescado!). Pero si no tenéis pececitos no os preocupéis, también comían crinoideos y crustáceos.
Torso con restos de peces parcialmente digeridos de Rhamphorhynchus muensteri. 










Cráneo y cuello de Rhamphorhynchus muensteri, mostrando restos parciales de peces en la región de la garganta.



    




En estos fósiles no solo encontraron lo que yo llamo ‘productos marinos’, también había un misterioso material… nada más y nada menos que un posible pequeño vertebrado! 


También contamos con otros fósiles como el de Scaphognathus crassirostris, donde se encontraron restos de un pez bastante común: Leptolepides.
Fósil de Leptolepides.


  



 
Y ESTO NO ES TODO, quiero contaros algo que a mí me dejó un poco loca, y es que en Argentina encontraron a un Pterosautro guinazui, y ¿sabéis que había en sus tripas? Arena y grava! (interpretados como geogastrolitos) cuya función pudo ser la de ayudar a digerir alimentos difíciles.




Bueno lo cierto es que no les gustaba mucho lo verde, de hecho se ha asociado la dentadura con forma de lanza de Ludodactylus para un ser piscívoro y no herbívoro. 
A esta conclusión se llegó al creer que pudo confundir una hoja con un componente de su dieta normal, o simplemente, lo atrapó junto a otros alimentos, y esta (que encima era afilada) quedó en la bolsa gular
Hay evidencias de que intentó desalojar la hoja, pero se vio incapaz y murió. (Final trágico.)



A continuación, os voy a hablar de los dientes y de lo importante que es conservarlos para que dentro de unos cuantos millones de años nuestros sucesores sepan qué darnos de comer si volvemos a la vida (si es que para dentro de tanto tiempo sigue habiendo humanos o algo por el estilo).

Bien, se han encontrado arañazos microscópicos que crean texturas superficiales características que van a variar según la dieta. Un análisis en dientes del pterosaurio Dimorphodon macronyx demostró que el desgaste de sus dientes sugería un banquete de insectos y vertebrados terrestres. (¡Buenas noticias!, vamos aumentando los ingredientes para la cena)

*Para estos análisis se han utilizado microscopios de enfoque infinito y métodos estadísticos para observar patrones de desgaste en pterosaurios junto a los dientes de especies vivas como murciélagos y cocodrilos, cuya dieta se basa en insectos, peces y otros vertebrados



Y PARA IR FINALIZANDO LA PUBLICACIÓN, si no tenéis a mano ninguno de estos ingredientes, podéis decirles esa noche que os los traigan ellos mismos, porque sí, hay evidencias de que estos animales pudieron cazar en la oscuridad. Esto se sabe por el ‘anillo escleral’ del hueso dentro del ojo, que es grande en relación con el diámetro externo y por lo que el ojo estaría bien adaptado para tratar con niveles bajos de luz.
Esto no quiere decir que todos tuvieran esta habilidad, Archaeopteryx lithographica y Confuciusornis sanctus no.
 


Ctenochasma elegans, un ejemplo de pterosaurio con capacidad de cazar en la noche.



OS AÑADO UN PEQUEÑO GLOSARIO 
QUE PUEDE SERVIROS DE UTILIDAD 
PARA ACABAR DE ENTENDER ALGUNOS CONCEPTILLOS:







  • Escamas ganoideas: tienen forma de rombo y están cubiertas con una capa similar a un esmalte. Actualmente, los esturiones serían un ejemplo de estas escamas.
  • Crinoideos: también conocidos como lirios de mar, tienen un esqueleto de calcita macizo y fueron abundantes en las profundidades de los fondos marinos no muy profundos Paleozoicos.
  •   Bolsa gular: bolsa de piel inflable presente en la región cervical en algunas especies de aves, mamíferos, reptiles y anfibios, utilizada para amplificar sonidos, almacenar alimentos o el cortejo.
  • Anillo escleral: formación compuesta por huesecillos en el interior de la esclerótica del ojo de las aves.


Y con esto me despido hasta la próxima publicación, espero que os haya gustado y lo hayais leído hasta aquí, sin saltaros ni una sola coma. 






  •  Pickrell, J. (2018). Tooth scratches reveal new clues to pterosaur diets. Nature, 553(7687), 138.

  •  Schmitz, L. & Motani, R. Science doi:10.1126/science.1200043 (2011).

  • Witton, M. P. (2018). Pterosaurs in Mesozoic food webs: a review of fossil evidence. Geological Society, London, Special Publications, 455(1), 7-23.

Article 10

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Los dientes fósiles del Hombre de Pekín

El "Hombre de Pekín" de Zhoukoudian Localidad 1, Beijing, China, es uno de los primeros y más emblemáticos homínidos jamás encontrados en la historia de la humanidad . Se refiere a Sinanthropus pekinensis (ahora generalmente agrupado en el taxón Homo erectus ) nombrado por Black en 1927. La interpretación evolutiva de los materiales de hominina Zhoukoudian ha cambiado a lo largo de los años. La descripción primaria y la comparación de los materiales de Zhoukoudian llenaron, en ese momento una brecha percibida entre el mono y el hombre, y fueron cruciales para la caracterización de la especie H. erectus . Los estudios posteriores sugirieron que Zhoukoudian tenía un papel menos central en nuestra historia evolutiva, que no representa más que una rama lateral en nuestro "árbol genealógico" . Algunos investigadores incluso han argumentado que la muestra de Zhoukoudian puede no ser un buen representante deltaxón H. erectusdadas las diferencias craneales distintivas que tienen en comparación con las contrapartes de Java a las que la especie fue nombrada en.
           

El problema es que, durante muchas décadas, el nombre H. erectus se ha utilizado como un término general para referirse a casi cualquier homínido encontrado en Asia durante el Pleistoceno hasta la aparición del Homo sapiens . Datos fósiles y genéticos recientes sugieren que las taxonomías de los homínidos asiáticos pueden haber sido simplificadas en exceso. En particular, descubrimientos como el cráneo de Xuchang en el norte de China  o la reevaluación de muestras de fósiles como Xujiayao , Maba o Panxian Dadong  refuerzan la idea de que otros linajes homininos diferentes de H. erectuspuede haber vivido en Asia continental durante el mismo período. Estos fósiles presentan algunas características primitivas en común con otras muestras de H. erectus : el endocast de Maba es estrecho en los lóbulos frontales y corto y aplanado en las áreas parietales; la neurocrania de Xuchang es baja e inferiormente amplia; la muestra de Xujiayao comprende un cráneo grueso y fuertemente construido, y los molares grandes y complejos  y el incisivo central superior Panxian Dadong muestran proyecciones conspicuas en forma de dedo en su superficie lingual. Mientras muestran un grupo de características ancestrales, estos homínidos también muestran características derivadas que los aproximan a H. sapiens.
Dado un contexto taxonómicamente más diverso para el Pleistoceno medio en Asia, la identificación y definición de características morfológicas que pueden definir H. erectus en China, se convierten en un tema de importancia central para comprender la historia evolutiva del género Homo en Asia continental.
Desafortunadamente, la mayoría de los fósiles de Zhoukoudian desenterrados antes de 1937 se perdieron durante la Segunda Guerra Mundial. Como consecuencia, la mayoría de los estudios y discusiones sobre esta muestra primordial, en los últimos 80 años, se han basado únicamente en moldes y en las descripciones y dibujos realizados por Weidenreich en 1930 sy 1940. Esto ha impedido las aplicaciones de las últimas tecnologías desarrolladas en el campo de la antropología virtual, como la microtomografía (micro-CT).
Después de la Segunda Guerra Mundial, se desarrollaron tres excavaciones sistemáticas en la localidad de Zhoukoudian 1  . Las excavaciones de 1949-1959 proporcionaron cinco dientes aislados y una mandíbula  . Otro diente aislado fue encontrado en 1966 . Estos seis dientes nos brindan la oportunidad de reestudiar y caracterizar las características dentales del Zhoukoudian utilizando fósiles originales, en lugar de moldes y descripciones. 
Aquí resumiremos las morfologías de los 6 dientes fósiles de Zhoukoudian y sus comparaciones con otros H. erectus sl . Se puede encontrar una descripción detallada y una comparación de cada diente en la Descripción de las morfologías dentales y la Morfología dental comparativa del Texto SI y la Tabla  1 de la información suplementaria.
Los dientes fósiles de Zhoukoudian Localidad 1. De izquierda a derecha son PA66, PA67, PA68, PA110, PA69 y PA70.
 Reconstrucciones virtuales en 3D de los dientes fósiles de Zhoukoudian. Primera fila: vista oclusal de la superficie del esmalte; segunda fila: vista oclusal de la superficie de la dentina; tercera fila: vista bucal del diente completo con el esmalte y la dentina transparentes y la cavidad pulpar siendo opaca; cuarta fila: vista mesial del diente completo con el esmalte y la dentina transparentes y la cavidad pulpar siendo opaca. De izquierda a derecha son PA66, PA67, PA68, PA110, PA69 y PA70.
Las comparaciones de Zhoukoudian y Hexian I 1 s en las características de la superficie de la dentina. B: bucal; D: distal; M: mesial. Tenga en cuenta las crenulaciones de la dentina en la superficie labial.

Las comparaciones de Zhoukoudian, Hexian, Yiyuan, Xichuan, Hualong Cave I 1 s, P 3 , P 4 y M 2 s en las morfologías de la cavidad pulpar.
Comparación de las superficies de dentina M 1 de Zhoukoudian y otras muestras comparativas. Nivel TD6 de Atapuerca-Gran Dolina; SH: Atapuerca-Sima de los Huesos; RMH: humano moderno reciente.
Dado que la las comparaciones son muy liosas, he realizado una tabla con las comparaciones y características más importantes a modo resumen:

TIPO
CARACTERÍSTICA
SEMEJANZA
PA66 (Izquierda I 1 )
·  pala pronunciada, una superficie labial moderadamente convexa, una fuerte eminencia basal y varias prolongaciones linguales con dedos.
·  arrugas bucales y crestas linguales en el OES  también está presente en el EDJ y la superficie de la cavidad pulpar
·        Zhoukoudian I, Hexian, Dmanisi y Sangiran, H. ergasterafricano, como KNM-WT 15000.
·        Hexian I
PA67 (derecha P 3 )
·                   Contorno asimétrico de la corona, una cresta transversal continua y una cresta esencial bifurcada de la cúspide bucal, a aparición de una cresta transversal.
·                   raíces bucales y linguales fusionadas externamente con ápices bífidos, la reconstrucción tridimensional revela tres conductos radiculares independientes, por lo que debe clasificarse como de tres raíce
·                 más frecuente en Asia que en África H. erectus sl . En ZKD16, Dmanisi D3672, Sangiran 4, Sangiran 7-35, Xichuan PA543 y Hexian PA832
·                 Hexian PA832, Sangiran 7-35 y African H. ergasterKNM-ER 1808
PA68 (derecha P 4 )
·   El contorno de la corona es similar a una elipse y ligeramente asimétrico, y los anchos de las cúspides bucal y lingual son aproximadamente iguales 
·   cresta transversal continua
·   La raíz es ancha y comprende dos radicales que se unen a lo largo de la mayor parte de su longitud excepto por una punta fuertemente bifurcada.
·típico de otro H. erectus sl . especímenes 
·ZKD 27, Sangiran 7-29 y KNM-ER 3733
PA110 (derecha P 3 ) 
El contorno de la es asimétrico con una esquina distolingual ligeramente sobresaliente 
Sangiran, Tighenif, Atapuerca TD6, KNM-WT 15000 y KNM-ER 992. D211 y D2375
Los Zhoukoudian M 1 s
contorno de corona relativamente más ancho que H. ergaster
el valor mediano de Zhoukoudian H. erectus es más alto que el de los primeros Homo , H. ergaster y Dmanisi africanos , aunque sus rangos de variación se superponen
Sangiran y Tighenif Y ara vez se ve en otros especímenes de H. erectus sl .
 Zhoukoudian PA69
La superficie EDJ está muy replegada principalmente debido al desarrollo de varias crestas secundarias que acompañan a la cresta esencial de las cúspides y que se ha definido como "dendrítica"
molares Hexian y Yiyuan
 PA69
En la superficie EDJ, una cresta protoconidal mesial está presente en la cara mesial del protosólido y forma una combinación de estante protocónido protosólido 
Xichuan PA531, pero menos obvia en el Tighenif 2 y ausente en MA93
 Zhoukoudian M 2
contorno de corona redonda donde tanto el trigonido como el talonido se expanden bucolingualmente en relación con su longitud. Además, no hay constricción a lo largo del contorno de la corona para separar trigonid y talonid. El valor mediano del rango de variación para el índice de corona (BL * 100 / MD) de Zhoukoudian M 2 s es más alto que todas las muestras involucradas en el presente estudio, excepto para los homininos del este asiático del Pleistoceno medio (Hexian y Yiyuan) y Europa moderna temprana humanos. Además, el valor medio de Zhoukoudian excede el límite superior de variación del Pleistoceno Inferior del Este Asiático (Sangiran Bapang-AG), H. ergaster y África tempranaHomo. La prueba t independiente muestra que las diferencias en el índice de la corona entre Zhoukoudian y Australopithecus(p <0.01), Homo temprano africano (p <0.05), homininas europeas del Pleistoceno medio (p <0.05) y humanos modernos recientes (p <0.01 ) son significativos.
Zhoukoudian PA70
superficie EDJ "dendrítica", altamente crenulada, con crestas interconectadas, crestas esenciales bifurcadas, crestas accesorias y cúspides accesorias.
muestra una superficie EDJ mucho más simple en comparación con las de Zhoukoudian, Hexian, Yiyuan y Xichuan. 
Las superficies EDJ de algunos Pongo M 2 son de hecho bastante lisas y en aquellos casos en que están más crenuladas, las crestas accesorias son generalmente más delgadas y más bajas que las de Zhoukoudian, Hexian, Yiyuan y Xichuan.
Hexian PA839 y Yiyuan Sh.y.072, es más pronunciada que en PA69 

Esta es la primera vez, desde las publicaciones de los dientes Zhoukoudian por Black en 1927 1 y Weidenreich en 1937 4 , que se proporcionan nuevos datos originales, incluyendo un detallado y exhaustivo estudio de la endostructura de la mayoría de los dientes de Zhoukoudian conservados hasta la fecha. Este artículo también presenta las primeras comparaciones directas de la muestra original de Zhoukoudian con una gran muestra de dientes del Pleistoceno Inferior y Medio de Asia (p. Ej., Cueva de Xichuan y Hualong) y Europa (los fósiles Gran Dolina-TD6 y Sima de los Huesos de Atapuerca). La nueva evidencia confirma las similitudes de la muestra de Zhoukoudian con otros homínidos del este del Pleistoceno Medio como Hexian , Yiyuan , y Xichuan, y nos permiten definir un patrón dental característico para las poblaciones que habitaron China durante el Pleistoceno Medio y que generalmente se clasifican como H. erectus clásico.
Externamente, los dientes de Zhoukoudian muestran las características dentales que se han propuesto en estudios previos como típicos del Pleistoceno medio oriental H. erectus como:
1.                  superficies labiales moderadamente convexas, tubérculo dental en forma de varias prolongaciones en forma de dedos y pala pronunciada en los incisivos centrales superiores
2.                  contorno de la corona expandida buco-lingualmente en M 2
3.                  cúspides mesiales bucolinguales expandidas en comparación con las cúspides distales en molares
4.                  aparición rara de cresta trigonal media
5.                  raíces dentales robustas "columna-como" que solo se estrechan en la punta,
6.                  estante como protoconid protostylid y mesial cresta en el EDJ. 

Gracias a la aplicación de la exploración con micro CT, este artículo presenta algunas características morfológicas en la superficie de la dentina que hasta el momento no se han informado en ningún otro homínido fuera de China y que podrían representar características únicas del H. erectus clásico en esta región.
Los estudios futuros y más datos podrían arrojar luz sobre el significado evolutivo de esta superficie EDJ altamente crenulada. H. erectus tanto del Asia continental como del sudeste se ha caracterizado por mostrar un cierto grado de reducción dentognática en comparación con las poblaciones contemporáneas de África. La reducción dental en estos grupos se evalúa en las dimensiones de corona relativamente más pequeñas. Sin embargo, las raíces siguen siendo particularmente grandes y robustas, con un aspecto característico de "columna similar" que conforman el bauplano dental de H. erectus que definimos anteriormente. Este patrón refleja los diferentes mecanismos ontogenéticos que regulan el esmalte y la dentina.

ARTÍCULO COMPLETO: 
https://www.nature.com/articles/s41598-018-20432-y

El inventor del vuelo moderno.

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Figure 5En la publicación de hoy proseguiremos en el hilo de descubrimientos de antiguas especies o de nuevos hallazgos relacionadas con estas, para responder a misterios de los que hasta ahora se poseía muy poca información. Hoy nos vamos a basar en el estudio de unos españoles y argentinos (Flight reconstruction of two European enantiornithines (Aves, Pygostylia) and the achievement of bounding flight in Early Cretaceous birds), en él, relacionan ese vuelo tan característico de muchas de las aves modernas, que intercala vuelo intermitente a través de aleteo (fases de aleteo alternas y fases de deslizamiento con alas extendidas) con el acotado (fases de aleteo y balística con las alas plegadas contra el cuerpo), que hasta ahora se pensaba que fue desarrollado muy posteriormente cuando las aves se empezaron a diversificar, pues había muy poca información de que estas estrategias aereas pudieran haber evolucionado tan tempranamente.
El estudio está basado en la teoria aerodinámica y biomecánica, su estudio reconstruye los modos de vuelo de dos pequeñas enantiornitinas del sitio del fósil del Cretácico Inferior de Las Hoyas (España): Concornis lacustris y Eoalulavis hoyasi.
El estudiodefiende que el pequeño tamaño de las alas con su bajo peso lo que supondría una ventaja hace consistente la idea de que estos pequeños pajaros pudiesen mantener un aleteo constante o acotado, pues estas características permiten disminuir el coste de la inercia sobre el ala; sin embargo ambos pájaros han sido descartados como planeadores facultativos.





Referencias:
https://onlinelibrary.wiley.com/doi/full/10.1111/pala.12351

Enlaces de interés:
Teoria aerodinámica
teoria biomecánica
enantiornitas
pygostylia

Seco, o no seco, he ahí el dilema

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Los geólogos se han estado comiendo el coco por un temita relacionado con el Messiniense y que involucra al mar Mediterráneo. Al parecer durante esta edad, que dura unos 1,913 Ma (desde hace 7,246 Ma hasta 5,333 Ma; por lo que se sitúa dentro del cenozoico), el mar Mediterráneo pudo haberse secado total o parcialmente al cerrarse el estrecho de Gibraltar, la única entrada de agua desde los océanos.



Esto es lo que se conoce como la crisis salina del Messiniense (MSC, del inglés, Messinian Salinity Crisis), en la que se llegaron a depositar hasta 3 kilómetros de evaporitas bajo el Mediterráneo. Se piensa que esta crisis pudo tener importancia a escala global, ya que los expertos estiman que se pudo perder desde un 5% a un 10% del contenido salino de los océanos. Además, si el Mediterráneo se llegó a cerrar de forma total, la circulación de los océanos también debió sufrir cambios.

Los geólogos no se ponen de acuerdo sobre cuándo ni cuánto bajó el nivel del mar. Unos creen que la sal precipitó en cuencas profundas en un ambiente submarino, mientras que otros creen que fue en un ambiente de desecación en aguas poco profundas.


Para poder confirmar qué opción es la correcta, se necesitaba una perforación de las cuencas. En este trabajo se estableció la edad de la base del depósito de halita del Mediterráneo oriental al estudiarse una sección de 320 metros correspondiente a la zona inferior a las evaporitas y a la base de estas. Se obtuvieron muestras cada 9 metros, haciendo un total de 35 muestras. El área de estudio se encontraba a 100 kilómetros desde la costa de Israel.

En la parte de la izquierda, en negro cada uno de los puntos de donde había perforaciones.
En amarillo, el lugar de estudio.

En la sección se encontraron foraminíferos desde el final del Tortoniano al Messiniense. Se reconocían hasta un total de cinco eventos bioestratigráficos, que proporcionan las edades para la datación: última aparición de Globorotalia menardii(7,718-7,726 Ma), primera aparición de G. miotumida (7,240-7,246 Ma), mayor cantidad de G. scitula (6,716-6,717 Ma), el cambio producido en los neogloboquadrinidos (6,348-6,377 Ma) y la llegada de nuevos neogloboquadrinidos (6,11-6,144 Ma). La presencia de foraminíferos apoyaba el hecho de que la deposición de la sal se produjo en un ambiente normal. Extrapolando las tasas de sedimentación para la parte superior de las rocas pre-evaporíticas se obtuvieron edades de 5,98 a 5,81 Ma.

En la imagen están representados diversos foraminíferos. Cabe resaltar:
1—Neogloboquadrina sp.; 3—Globorotalia miotumida; 5— G. scitula; 6— G. menardii

Para otros lugares en el Mediterráneo también se obtuvieron edades de 5.97 Ma para la parte superior de las pre-evaporitas. Para el comienzo de las rocas evaporíticas se obtuvieron las mismas edades. Esta correlación en las edades implica que la MSC no fuese un proceso puntual, y que por lo tanto entre las pre-evaporitas y la deposición salina no hay discordancias. Si no hay discordancias, los yesos de las cuencas menos profundas se comenzaron a formar a la vez que las evaporitas de las más profundas.

Este hallazgo sugiere que deberían revisarse los modelos que se tenían para la deposición durante la MSC, pero también lo que se pensaba hasta ahora del clima en este periodo de tiempo y de la circulación oceánica. También es cierto (y esto hay que decirlo), que este trabajo no sugería que el Mediterráneo pudiera secarse más tarde, pero sí que al menos no lo estaba cuando comenzó la MSC.



Definiciones de términos que no se han explicado:
-Tortoniano: o Tortoniense, es una edad del cenozoico anterior al Messiniense que va desde hace 11,62 Ma hasta 7,246Ma.
-Foraminíferos: organismos protoctistas generalmente marinos, caracterizado por una concha con una o varias cámaras interconectadas.

Referencias:
-Aaron Meilijson, Josh Steinberg, Frits Hilgen, Or M. Bialik, Nicolas D. Waldmann & Yizhaq Makovsky. 2018. Deep-basin evidence resolves a 50-year-old debate and demonstrates synchronous onset of Messinian evaporite deposition in a non-desiccated Mediterranean. The Geologogical Society of America, 46: 243-246.

Article 7

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DESCUBRIMIENTO DE UNA EXTRAÑA ESPECIE DE ARÁCNIDO


CHIMERARACHNE YINGI

Esta nueva especie conservada en un bloque de ámbar, fue bautizada como Chimerarachne yingidata a medidos del Cretácico (hace aproximadamente 100 años) en Birmania o Myanmar, un país de Asia ubicado en el extremo noroeste de la subregión Sudeste Asiático.


UROPÍGIDO
Describimos este descubrimiento como extraño ya que a diferencia de cualquier araña actual, la Chimerarachne yingi tiene una larga cola o flagelo (ésta mide unos 3 milímetros, mientras que su cuerpo tiene una extensión de 2.5 milímetros). Podríamos pensar que se trata de una especie perteneciente a la familia del escorpión por esta característica tan peculiar pero podemos estar seguros de que se trata de un arácnido por su aspecto: tiene colmillos, pedipalpos masculinos (unos apéndices situados delante de la boca del animal) modificados para la transferencia de espermatozoides, ocho patas y órganos productores de seda en la parte posterior bien definidos similares a las de las modernas arañas mesoteliales. Hoy en día, tan solo los uropígidos tienen una anatomía similar, como podemos observar en la fotografía.  



-¿Y para qué utilizaban esta cola? 
Probablemente para la detección. Según los investigadores:
Cualquier tipo de anexo flageliforme tiende a ser como una antena, probablemente para detectar lo que ocurría alrededor. Los animales que tienen una cola larga tienden a tenerla para fines sensoriales. ”

Paul Selden, el primer autor del estudio y científico en la Universidad de Kansas (EE.UU.), pretende resaltar las características de esta especie con el nombre de «Chimerarachne»,  con la intención de remarcar que este animal tiene rasgos de arañas modernas (pérdida de la cola) y otros de arañas antiguas (no productoras de seda).
Esta combinación de caracteres única se resuelve afirmando que la Chimerarachne yingi formaparte de un orden de arácnido extinta conocida como Uraneida, que también tiene forma de araña y tiene una cola, pero que no tenía hileras y además, perteneciente al orden Araneae pues estas si posen órganos productores de seda. Sin embargo, este estudio liderado por Paul Selden mantiene que probablemente este nuevo fósil represente la rama más antigua deAraneae, lo que implica que había un linaje de arañas de cola que se originaron en el Paleozoico y sobrevivieron al menos en el Cretácico del sudeste asiático.



BIBLIOGRAFIA:

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